BRASILIA.- El Tribunal Supremo de Brasil aceptó este jueves las apelaciones de uno de los condenados en el llamado "juicio del siglo", rechazó las de otro y pasó a discutir los últimos recursos posibles, que piden un nuevo proceso para al menos 11 de los reos.
Durante la sesión de esta jornada, la instancia analizó las dos últimas apelaciones presentadas por los 25 condenados en este proceso, que se refiere a una red de corrupción tejida por el Partido de los Trabajadores (PT) en 2002, cuando llegó al poder por primera vez el ahora ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Mediante esa red, el PT financió campañas y sobornó a dirigentes de otros cuatro partidos, según ha considerado probado el tribunal.
En la sesión se aceptó el pedido de reducción de pena interpuesto por Joao Claudio Genú, exasesor del Partido Progresista (PP) y quien alegó que recibió siete años y tres meses de prisión, cuando los entonces diputados Pedro Correa y Pedro Henry, sus jefes en esa formación y también implicados, tuvieron un castigo menor.
El tribunal aceptó la "incongruencia" de su decisión inicial y optó por reducir la pena de Genú, para situarla en cuatro años, lo que le permitiría beneficiarse del régimen semi-abierto, que sólo lo obligará a dormir en prisión.
La última apelación juzgada por el Supremo en esta fase fue la presentada por Rogério Tolentino, uno de los socios de dos empresas de publicidad que se pusieron al servicio de las corruptelas.
Tolentino fue condenado a ocho años de prisión por los delitos de lavado de dinero, corrupción activa y asociación ilícita, una sentencia que fue ratificada por la mayoría de los magistrados.
Concluida la primera fase de apelaciones, el Supremo ratificó las penas aplicadas a casi todos los condenados, salvo en los casos de Genú y del agente bursátil Breno Fischberg, a quien también se le redujo ligeramente el castigo.
En el último capítulo del proceso, serán juzgados unos recursos a los que tienen derecho los reos que han sido condenados pese a haber tenido al menos cuatro votos a favor de su inocencia entre los once miembros de la corte.
En esa situación están 11 de los condenados y entre ellos se destaca el caso del exministro de la Presidencia José Dirceu, quien en la época era considerado la "mano derecha" de Lula y que recibió una pena de 10 años y 10 meses de prisión.
Si esos últimos recursos fuesen aceptados, los reos que resulten beneficiados pudieran hasta tener derecho a un nuevo juicio.