BRASILIA.- El Ejército brasileño advirtió este viernes que podrá usar la fuerza en Río de Janeiro para impedir que mañana se produzcan ataques a la tropa que participará de los desfiles que se realizarán para conmemorar el Día de la Independencia brasileña.
La advertencia, realizada a través de un comunicado, fue una respuesta a la masiva convocatoria a actos de protesta durante el feriado que se viene realizando a través de las redes sociales en al menos 175 ciudades brasileñas.
Como forma de reforzar la seguridad durante los actos ante "amenazas de acciones violentas", el comando del Ejército redujo en un 40 por ciento los efectivos que participarán del desfile, que serán unos 6.000, aumentando así los que actúen en el esquema de seguridad.
También se redujo el tiempo de duración del desfile, que será de dos horas en lugar de tres, como estaba previsto.
Similar resolución adoptó la Policía Militarizada, que viene siendo blanco de duras críticas por su accionar violento ante las manifestaciones populares.
A nivel nacional, las autoridades dispusieron un fuerte esquema de seguridad.
En Brasilia, donde además de los desfiles mañana se jugará el partido amistoso entre Brasil y Australia, y donde en junio pasado se produjeron las primeras protestas populares que luego se propagaron a centenas de ciudades en todo el país durante la Copa Confederaciones, la Secretaría de Seguridad Pública desplazará a 4.000 policías adicionales para vigilar las calles de la ciudad.