''Decidí que Alemania daría su firma cuando se lograra una posición común europea'' aclaró Angela Merkel.
EFEBERLÍN.- La canciller alemana, Angela Merkel, criticó hoy que cuatro países de la UE firmaran en la cumbre del G20 de San Petersburgo una declaración sobre la crisis en Siria sin esperar a conocer la opinión del resto de socios europeos.
El documento fue suscrito por España, Francia, Italia y el Reino Unido.
"No me parece correcto que cinco grandes países, sin contar con los otros 23 que no pueden estar ahí, aprueben una posición común sabiendo que 24 horas después, los 28 van a sentarse juntos", subrayó Merkel en un acto de campaña.
Alemania fue el único país europeo que no firmó la declaración sobre el conflicto sirio en la cumbre del G20, pero adhirió a ella al día siguiente en la reunión de ministros de Asuntos Exteriores celebrada en Vilna (Lituania).
El giro fue duramente criticado por la oposición germana, en plena campaña electoral.
Accidentado consenso
La canciller, quien ayer justificó su actuación argumentando la importancia de la unidad europea, volvió a defenderse este domingo.
"Decidí que Alemania daría su firma cuando se lograra una posición común europea", señaló en un acto en Düsseldorf.
El texto suscrito en San Petersburgo por Australia, Canadá, Francia, Italia, Japón, Corea del Sur, Arabia Saudí, España, Turquía, Reino Unido y EE.UU., respalda una "fuerte respuesta internacional" tras el uso de armas químicas en Siria.
En una entrevista publicada hoy en el dominical "Bild am Sonntag", Merkel mantiene su apuesta por buscar el consenso en el Consejo de Seguridad de la ONU para encontrar una solución política a la crisis siria y garantiza que su país no tomará parte en una acción militar contra el régimen de Damasco.