Marcha de este miércoles en Caracas por el ''Once''.
EFECARACAS.- Varios centenares de personas marcharon este miércoles por Caracas al cumplirse 40 años del golpe de Estado en Chile, entre llamados a "derrotar el fascismo" y homenajes al depuesto Presidente socialista Salvador Allende.
La jornada comenzó con una ofrenda floral frente a una estatua de Allende en la caraqueña Plaza Venezuela, en un acto encabezado por el vicepresidente, Jorge Arreaza, y el canciller, Elías Jaua, quienes aprovecharon la ocasión para recordar que Venezuela enfrenta sus propias "amenazas fascistas", al igual que Chile 40 años atrás.
"Chile nos deja lecciones importantes para los pueblos de América Latina: que la democracia es un valor sustantivo, y que mucho más allá de las diferencias que se puedan tener con un gobierno, todo pueblo que quiere vivir en paz tiene que defender sus instituciones democráticas", dijo Jaua.
Los manifestantes, muchos de ellos con carteles con el rostro de Allende y vestidos con el característico color rojo del chavismo, partieron de la Plaza Venezuela y terminaron su movilización en el Palacio de Miraflores, donde fueron recibidos por el Presidente Nicolás Maduro.
"Queremos mostrar que somos un pueblo unido. Hoy salimos a la calle a decir que los países deben ser soberanos y libres", describió una manifestante a la televisión estatal.
Encuentro "antifascista"
La actividad se enmarca dentro de lo que el gobierno venezolano denominó el "Primer Encuentro Internacional Antifascista por la Paz y por la Vida", que comienza hoy y se extenderá hasta el 15 de septiembre con la realización de diversos actos artísticos y foros de discusión.
Jaua anticipó que en los foros participarán distintas personalidades de la izquierda iberoamericana, como el escritor uruguayo Eduardo Galeano y el periodista español Ignacio Ramonet, junto a autoridades oficiales, como el vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera.
La movilización fue rechazada por el líder opositor Henrique Capriles, que acusó al gobierno de preocuparse por hechos que ocurren en otros países y no de los problemas de los venezolanos.