EL CAIRO.- Seguidores del movimiento egipcio de los Hermanos Musulmanes se manifestaron la pasada noche en varias ciudades contra la decisión de un tribunal de El Cairo de prohibir todas las actividades de esa organización islamista.
Durante una manifestación en Shabramant, próxima a El Cairo, un seguidor de los Hermanos Musulmanes fue asesinado a tiros por vecinos que atacaron la marcha de protesta. El movimiento islamista, sin embargo, manifestó su determinación de no desaparecer de la vida pública: "Existimos desde hace 85 años y seguiremos existiendo".
Los Hermanos Musulmanes tienen la intención de interponer un recurso de apelación contra la proscripción. En opinión de los islamistas, el tribunal cairota para juicios sumarísimos ni siquiera era competente para decidir en este asunto. Varios partidos liberales y de izquierda habían celebrado la decisión del tribunal del lunes.
El escritor egipcio Fahmi Howeidy criticó en el diario cairota "Al Shoruk" la creciente polarización política en el país. Según Howeidy, es irrelevante quién logre una victoria en el conflicto entre los Hermanos Musulmanes y las fuerzas aliadas al ejército, "porque al final la gran perdedora va a ser la nación". El escritor, que suele ser benévolo en sus comentarios con los partidos políticos islamistas, pidió moderación a los Hermanos Musulmanes.
Mientras tanto, la policía egipcia está deteniendo a cada vez más personas sospechosas de haber participado en los ataques perpetrados en agosto contra iglesias y comisarías de policía. Algunos de ellos pertenecen a movimientos islamistas, otros son delincuentes comunes.
La televisión estatal informó hoy de la detención de Mohamed Makkawi, ex secretario del partido de los Hermanos Musulmanes en el barrio cairota de Al Warak. Está acusado de haber asaltado junto con otras personas la comisaría de policía del barrio.
En la localidad de Malawi, situada al sur de El Cairo, fue detenido un saqueador que había participado en un ataque a una iglesia, según la televisión estatal. La policía habría encontrado en su casa sillas robadas de una oficina municipal.