LIMA.- La Fiscalía peruana abrió este martes una investigación en contra del legislador Michael Urtecho, un minusválido al que se acusa de usar tal condición para quedarse con cientos de sillas de ruedas destinadas a personas que, como él, están imposibilitadas de caminar.
"Hay elementos razonables para suponer que existe un desbalance patrimonial debido a la adquisición de un edificio valorizado en 1,3 millones de dólares, en (la ciudad norteña de) Trujillo", dice la resolución.
El persecutor general, José Peláez Bardales, ha solicitado información financiera a las centrales de riesgo sobre el congresista y su esposa, Claudia Gonzales, así como el levantamiento del secreto bancario y de la reserva tributaria desde enero de 2011.
El escándalo empeoró el fin de semana, cuando un programa de televisión documentó que Urtecho, del partido conservador Solidaridad Nacional y quien padece de distrofia muscular desde la niñez, recibió 1.014 sillas de ruedas para ser donadas, pero sólo entregó documentadamente 393, sin que se sepa el paradero de las restantes.
En ese momento, ya estaba cuestionado por denuncias de sus empleados en el Congreso de que se quedaba arbitrariamente con parte de sus salarios.
Una trabajadora documentó, por ejemplo, que aunque su sueldo era de 4.600 soles mensuales (1.700 dólares), el congresista solo le entregaba 800 soles (US$ 300).
Urtecho ha negado las acusaciones y ha asegurado que demandará a quienes han declarado en su contra. Asimismo, asegura que todas las sillas fueron repartidas, varias de ellas a través de colegas a los que supuestamente se las entregó.