MOSCÚ.- El Presidente ruso, Vladimir Putin, aseguró hoy que aunque los activistas de Greenpeace detenidos por tratar de asaltar una plataforma petrolífera en el Ártico no son piratas, violaron con su acción las normas internacionales.
"Es absolutamente obvio que, por supuesto, no son piratas. Pero de hecho trataban de asaltar la plataforma", afirmó el Mandatario horas después de la detención preventiva de los treinta activistas de Greenpeace cuyo rompehielos "Arctic Sunrise" fue apresado el pasado jueves en aguas del Ártico.
Precisamente de piratería quiere acusar el Comité de Instrucción ruso a los treinta activistas de la ONG internacional, detenidos por intentar encadenarse a una plataforma del consorcio energético Gazprom y trasladados hoy a centros de detención provisional, según reveló la representante de la ONG para Rusia, María Favórskaya.
El líder del Kremlin aseguró que la acción de la ONG puso en peligro la salud e incluso la vida de los trabajadores de la plataforma "Prirazlómnaya".
"Pudo haber pasado cualquier cosa, un error de los operarios o fallos técnicos. Se puso en peligro la vida y la salud de las personas. ¿Acaso estas acciones propagandísticas merecen el riesgo de sus gravísimas consecuencias?", se preguntó Putin.
El jefe de Estado ruso también aclaró la violenta detención de los activistas el pasado jueves por parte de los guardacostas rusos, que abrieron fuego de advertencia contra el rompehielos de Greenpeace "Arctic Sunrise" y apresaron luego el barco para custodiarlo hasta el puerto de Múrmansk.
"Nuestros guardacostas no sabían quién trataba de asaltar la plataforma bajo la apariencia de Greenpeace. Sobre todo, en medio de los sangrientos acontecimientos de Kenia, cuando cualquier cosa podía ocurrir", afirmó.
Putin defendió la actividad económica en el Ártico y pidió a las organizaciones para la protección de medio ambiente que expresen "de forma civilizada" sus argumentos, inquietudes y denuncias.
"Para nosotros es obvio que la clave en el desarrollo del Ártico debe ser la conservación de la naturaleza, la garantía de un equilibrio entre la actividad económica, la presencia del hombre y la conservación del medio ambiente", señaló.
El gigante energético Gazprom planea comenzar la producción de petróleo en la plataforma "Prirazlómnaya" en el primer trimestre de 2014, lo que, según la ONG, aumenta el riesgo de que se produzca un vertido de petróleo en un área que contiene tres reservas naturales protegidas por la propia legislación rusa.