ROMA- El criminal de guerra nazi Erich Priebke fallecido en octubre en Roma, fue enterrado en el cementerio de una prisión en Italia, tras las disputas desencadenadas en torno a su lugar de sepultura.
Su tumba fue señalada con una cruz gamada con un número, pero no aparece su nombre ni tampoco fecha alguna, informó hoy el diario italiano "La Repubblica".
Tampoco se conoce el lugar exacto para evitar que se convierte en lugar de peregrinación de neonazis. Sólo la familia conocería esos datos.
La muerte de Priebke a la edad de 100 años en Roma desencadenó una disputa, al negarle la sepultura tanto las localidades de Bariloche, en Argentina, donde vivió muchos años, como la localidad de Henningsdorf, en Alemania, donde nació.
Según el diario, el cementerio de la prisión fue elegido luego de días de deliberaciones. Se buscaba también un lugar protegido para evitar ataques. En los últimos 20 años nadie fue enterrado allí.
Priebke participó en 1944 en una de las peores masacres nazis durante la Segunda Guerra Mundial en Italia en la que murieron 335 civiles. Hasta su muerte no mostró arrepentimiento alguno.