Obras en estadio mundialista que sufrió derrumbe en Brasil se reanudarán el lunes

SAO PAULO.- Las obras de construcción del nuevo estadio del Corinthians, que recibirá el partido inaugural del Mundial de Brasil 2014 en Sao Paulo, el 12 de junio próximo, serán reanudadas el lunes, pese a las investigaciones en curso sobre la caída de una grúa que causó la muerte a dos obreros hace dos días.

Según la constructora Odebrecht, responsable de la realización del proyecto, el Ministerio brasileño de Trabajo prohibió el uso de otras nueve grúas que hay en la obra, hasta que se confirme que no existe riesgo de que se repita el problema registrado hace dos días.

Además, la Defensa Civil canceló la realización de trabajos en el área afectada por la tragedia, que corresponde a un 10% de la superficie total de la arena.

Pese a ello, Odebrecht confirmó que las obras -suspendidas tras el accidente en señal de luto por las dos muertes- serán reanudadas el lunes.

"Los trabajos que no requieren de la utilización de grúas serán realizados normalmente, salvo por el área cerrada por la Defensa Civil", destacó la empresa, que explicó que las obras se concentrarán en aspectos como la instalación de sistemas eléctricos e hidráulicos y de asientos, entre otros.

Antes del accidente, que destruyó parte de las tribunas ya instaladas, el estadio estaba completo en un 94 por ciento, según anunció hace dos semanas la propia Odebrecht.

La prisa en reanudar los trabajos se debe a que el Corinthians prometió a la FIFA entregar el estadio listo a comienzos de enero, para que el ente rector pueda realizar las pruebas necesarias y corregir posibles fallas antes del Mundial.

Según el plan actualmente en vigencia, el "Itaquerao", como es conocido el estadio, recibirá cinco partidos de Brasil 2014, entre ellos el de apertura.

El diario "O Estado de Sao Paulo" informó hoy que la FIFA tiene un "plan B" para el caso de que no pueda utilizar la arena de Sao Paulo en el Mundial, pero la información fue negada por el comité organizador local (COL).

Las posibles consecuencias del accidente serán analizadas el 3 de diciembre en el resort de Costa do Sauípe, en una reunión de la FIFA con el comité organizador tres días antes del sorteo de los grupos del Mundial.