NYT
BANGKOK.- La calma prevalece este miércoles en el distrito administrativo de Bangkok tras dos días de disturbios que cesaron ayer después de que la policía recibiera órdenes de terminar su enfrentamiento con los manifestantes antigubernamentales.
Decenas de voluntarios trabajaban esta mañana para limpiar de escombros los puntos de concentración de manifestantes y las calles de la capital donde ocurrieron los enfrentamientos, aprovechando la tregua acordada ante la celebración mañana del aniversario del Rey Bhumibol Adulyadej.
El líder del movimiento opositor, el ex viceprimer ministro Suthep Thaugsuban, indicó que las protestas se reanudarán el viernes para erradicar lo que califica como "régimen de Thaksin", en referencia al ex primer ministro Thaksin Shinawatra, depuesto en 2006 en un golpe militar.
Suthep acusa a la actual primera ministra, Yingluck Shinawatra, de ser un títere de su hermano mayor, Thaksin, quien según los opositores gobierna desde su exilio en Dubai, donde evita una condena de dos años de prisión por corrupción.
Yingluck dijo que su gobierno quiere evitar nuevos episodios de violencia y propuso abrir conversaciones con académicos, empresarios, expertos y manifestantes para debatir sobre reformas políticas y acordar una salida democrática a la crisis.
"La situación política actual en nuestro país todavía no ha vuelto a la normalidad aunque se ha tranquilizado", dijo anoche Yingluck en un breve mensaje televisado.
La primera ministra hizo un llamamiento a la unidad para celebrar el aniversario del monarca tailandés, la autoridad moral, sin rol político, venerada por la mayoría de tailandeses.
Por la noche Suthep volvió a insistir en su propuesta de sustituir el gobierno por un "consejo popular" no electo, una opción que Yingluck rechazó días antes por ser contraria a la Constitución.
Mientras, la Policía detuvo a siete estudiantes por presuntamente quemar varios vehículos policiales durante los disturbios que ocurrieron durante la madrugada del martes cerca de la Casa del Gobierno.
Según el "Bangkok Post", los agentes también incautaron botellas y bolsas de plástico con gasolina y alcohol, navajas, palos de golf, pequeños explosivos y balas.
Decenas de personas sufrieron heridas durante estos disturbios, que comenzaron después de unos enfrentamientos entre partidarios y detractores del Gobierno que causaron cuatro muertos y más de 50 heridos la noche del sábado.
Tailandia arrastra una grave crisis política desde hace unos ocho años con frecuentes manifestaciones y protestas callejeras que buscan paralizar el Gobierno de turno.