BEIJING.- La policía de la región autónoma de Xinjiang (noroeste de China) informó hoy de la detención de seis personas relacionadas con el enfrentamiento entre fuerzas de seguridad y presuntos terroristas que causó 16 muertos el domingo por la noche.
Los agentes policiales confiscaron artefactos explosivos, armas de fuego de fabricación casera y machetes, señaló la web oficial Tianshan.net, vinculada al gobierno regional.
El ataque del domingo ocurrió en la aldea de Sayibage de la comarca de Shufu, cerca de Kashgar (centro cultural de la etnia musulmana de los uigures), cuando la policía practicaba registros en busca de un presunto líder terrorista llamado Hasan Ismail, indicó hoy la agencia oficial china Xinhua.
Unos veinte miembros de la banda de Ismail atacaron a los policías con artefactos explosivos y machetes, y apuñalaron y causaron la muerte de dos agentes, tras lo cual refuerzos policiales acudieron a la zona, abrieron fuego ante la negativa de los agresores a rendirse y causaron la muerte de 14 sospechosos.
Según la información de Xinhua, la banda, formada en agosto, "había promovido el extremismo religioso y confeccionado explosivos y armas de fuego para cometer ataques terroristas".
Los enfrentamientos entre fuerzas de seguridad chinas y grupúsculos armados se han vuelto muy frecuentes en la inestable región desde agosto de 2008, cuando 16 personas perdieron la vida en el primero de estos incidentes, ocurrido en Kashgar cuatro días antes del inicio de los Juegos Olímpicos de Beijing.
El Gobierno chino acusa a grupos terroristas de dirigir ataques esporádicos bajo la cortina del islamismo radical, pero grupos uigures en el exilio acusan al régimen comunista de reprimir la religión y la cultura de su pueblo, lo que es caldo del cultivo para actos violentos que según ellos son producto del descontento social.
Tras el ataque del pasado domingo, el Congreso Mundial Uigur, con sede en Alemania, señaló en un comunicado que "debe tenerse en cuenta que sigue habiendo una gran represión a los uigures, con cientos de ejecuciones extrajudiciales, incluidos jóvenes".
Un portavoz de la organización, Dilxat Raxit, aseguró desde Múnich (Alemania) que dos de los fallecidos en el reciente ataque eran menores de edad, según señaló hoy el diario "South China Morning post".
La capital regional de Xinjiang, Urumqi, fue en 2009 el escenario del peor enfrentamiento étnico en China de las últimas décadas, cuando diversas protestas de uigures se tornaron en violentas peleas con inmigrantes han que acabaron con alrededor de 200 muertos.