Los Gripen NG (cuyo nombre significa ''grifo'' en sueco) pueden portar misiles de última generación.
AFP (archivo)RÍO DE JANEIRO.- Luego de una década y media de debates, el gobierno de Brasil finalmente se decantó por cazabombarderos suecos para renovar su flota de combate de primera línea, en una decisión que dejó fuera a competidores de Estados Unidos y Francia.
Brasilia confirmó este miércoles que el aparato elegido es el Saab Gripen NG. El primer ejemplar debería llegar a ese país en 2018.
El contrato contempla la incorporación a la Fuerza Aérea Brasileña de 36 cazabombarderos, por un precio de unos 4.500 millones de dólares.
Modelos Gripen también fueron considerados en el proceso de renovación de la Fuerza Aérea de Chile (FACh), pero fueron desestimados en favor de los F-16C/D Block 50 de la estadounidense Lockheed Martin.
El ministro de Defensa de Brasil, Celso Amorim, dijo que la elección en el prolongado concurso "FX", zanjada después de casi 15 años de debate y con una suspensión de por medio, se tomó tras "un cuidadoso estudio y consideración, que tomó en cuenta el desempeño, la transferencia de tecnología y el costo, no solo de adquisición, sino también de mantenimiento".
En el ámbito de la transferencia tecnológica, el secretario de Estado indicó que el desarrollo de los cazabombarderos será realizado en conjunto con el gigante aeronáutico brasileño Embraer, junto a otras empresas locales.
El ministro de Defensa fue acompañado por el comandante en jefe de la Fuerza Aérea Brasileña, el teniente brigadier del Aire Juniti Saito, al emitir el anuncio oficial.
A su turno, el ministro de Relaciones Exteriores de la nación europea, Carl Bildt escribió en Twitter que la decisión era "un tributo a la tecnología y competitividad suecas".
Sorpresiva opción
La decisión de preferir los jets suecos al F-18 Super Hornet, de Boeing o el Dassault Rafale de Francia -considerando, en este último caso, que Brasil es operador del Mirage 2000, el avión que será reemplazado por los nuevos cazas-, sorprendió a muchos observadores.
El jet galo era preferido por el ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, mientras que se atribuía preferencia por el avión estadounidense a la actual Mandataria, Dilma Rousseff.
Algunos analistas consideraron que Boeing se vio afectado por las revelaciones del espionaje practicado por la Agencia de Seguridad Nacional de EE.UU. (NSA) a la propia jefa de Estado brasileña.
Brasil pretende reforzar su capacidad de defensa para patrullar sus fronteras terrestres, gran parte de las cuales están cubiertas de selva y son cruzadas por rutas de tráfico de drogas y armas.
Brasil también busca mejorar la protección de los yacimientos petroleros descubiertos en años recientes frente a sus costas.
Los Gripen (cuyo nombre significa "grifo", un animal mitológico, en sueco) pueden volar a una velocidad máxima de Mach 2 y su alcance llega a unos 3.200 km con estanques suplementarios. Tienen capacidad de portar misiles de última generación y una gran variedad de bombas y proyectiles.