BUENOS AIRES.- En medio de cortes de electricidad que afectan miles de personas en Buenos Aires y sus alrededores a raíz de una extensa ola de calor, el gobierno nacional de Cristina Fernández de Kirchner entró en polémica con el Ejecutivo de la capital argentina, encabezado por el opositor Mauricio Macri.
La vicejefa de gobierno de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, criticó el "silencio" de Fernández de Kirchner en medio de la crisis energética.
Macri dijo que las compañías Edesur y Edenor son "son responsables" por la prolongada interrupción del suministro eléctrico pero advirtió que "siempre, la responsabilidad principal es el gobierno nacional".
La administración central es la que "debe controlar, fiscalizar, que haya programas de inversiones y tener una política que incluya inversiones. Esto es lo que no ha habido en esta década, con lo cual, lamentablemente, estamos sufriendo las consecuencias", dijo Macri.
El alcalde pidió que se hagan cortes programados, a la vez que pidió al Ejecutivo nacional un cambio del huso horario en verano, a fin de ahorrar energía y morigerar el impacto para los usuarios que sufren interrupciones del suministro eléctrico.
El ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, le respondió: "En vez de hablar de cambiar la hora, Macri debería trabajar más".
El funcionario descartó tener dos husos horarios porque "generaría trastornos y costos mayores a los beneficios". Consideró que es "otro planteo oportunista" y "sin rigor técnico".
En tanto, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, remarcó que sólo "del 1 al 3 por ciento" de los usuarios de la zona metropolitana están afectados por los cortes de electricidad en medio de una intensa ola de calor que empezó dos semanas atrás.
Buenos Aires y alrededores atraviesa una inusitada ola de calor, que el Servicio Meteorológico calificó como la más extensa desde 1906, es decir desde que existen registros.
Capitanich se diferenció del gobierno de Macri al sostener que el Ejecutivo nacional trabaja "desde el inicio de la gestión" en la cuestión energética, mientras que el alcalde se sumó al operativo por los cortes de luz "recién el sábado".
El funcionario puntualizó que son "5,6 millones de usuarios" que reciben el servicio de luz en el área metropolitana, del cual "del 1 al 3 por ciento está siendo afectado, en lugares repetidos". Se trata de "problemas de distribución debidamente focalizados" que deberían resolver las empresas, dijo.
Capitanich dijo que "el volumen de inversión en estos diez años" de gestión kirchnerista "es un tercio del que se hizo en toda la historia" en energía.
El funcionario sostuvo que "superada la ola de calor" se "evaluará la aplicación de multas a las empresas de energía y resarcimiento a usuarios damnificados por los cortes".
Insistió con la responsabilidad de las compañías que prestan el servicio y que no se trata de "un problema de crisis energética" porque: "Acá no hay un problema ni de generación ni de transporte de energía sino de distribución, que es una responsabilidad exclusiva y excluyente que compete a las empresas que prestan ese servicio".
