LONDRES.- La autoría de una grabación falsa de Ronald Reagan y Margaret Thatcher discutiendo sobre la guerra de las Malvinas le dio auténticos dolores de cabeza al servicio secreto británico, según archivos desclasificados este viernes.
La cinta, supuestamente una conversación telefónica entre el entonces presidente estadounidense y la primera ministra británica, fue enviada de forma anónima a varios diarios holandeses, durante las elecciones generales de 1983 en el Reino Unido.
En esa falsa conversación sobre la guerra de las Malvinas, librada en 1982 entre Argentina y Gran Bretaña, Reagan pedía moderación, y Thatcher decía que quería castigar a Buenos Aires "lo antes posible".
La grabación se efectuó recortando y montando fragmentos sonoros de discursos de ambos mandatarios.
Finalmente, el grupo punk británico Crass reconoció que hizo el montaje de la falsa conversación. Pero sólo después de que los servicios secretos británicos y la CIA se tomaran la grabación tan en serio que llegaron a pensar que fuera obra del gobierno argentino o de la Unión Soviética.
En una carta, un consejero del ministerio de Relaciones Exteriores británico informó a Thatcher sobre la cinta, y sobre las hipótesis del servicio secreto acerca de la autoría de la grabación.
"Parece una operación más bien torpe. De momento no tenemos pruebas acerca de los responsables", decía la carta.
"El servicio secreto duda de si se trata de una operación soviética. Es posible que alguno de los servicios de inteligencia argentinos esté detrás. También podría ser obra de grupos de izquierda de este país", añadía la misiva.
Los documentos sobre este caso fueron desclasificados después de 30 años en los Archivos Nacionales.