KIEV.- Miles ucranianos pro-occidentales marcharon este domingo en el centro de Kiev en protesta por los golpes que recibió el ex ministro del Interior y actual dirigente de la oposición ucraniana, Yuri Lutsenko, durante enfrentamientos entre manifestantes proeuropeos y la policía.
Lutsenko salió de cuidados intensivos el sábado por la tarde por los golpes que había recibido durante una manifestación la noche anterior.
"Recibió unos 10 golpes en la cabeza", dijo el portavoz del ex ministro del Interior.
Unos 20 activistas resultaron heridos cuando intentaron impedir que la policía trasladara a la cárcel a tres jóvenes que poco antes habían sido condenados por un tribunal a seis años de prisión acusados de haber querido destrozar con explosivos en 2011 una estatua de Lenin cerca del principal aeropuerto de la ciudad.
Es la primera vez que se hace uso de la fuerza contra un líder ucraniano en la última oleada de protestas pro-occidentales en el país.
Ucrania ha sido escenario de continuas manifestaciones desde que presidente Viktor Yanukovich decidiera, a finales de diciembre, rechazar un acuerdo de asociación con la Unión Europea (UE), decantándose por la cooperación económica con Rusia.
La concurrencia a las protestas decayó tras la concesión de un paquete de ayuda de 11.000 millones de euros (US$ 15.000 millones de dólares) de Rusia a Ucrania a mediados de diciembre.
Pero la ira ante lo que muchos consideran órdenes personales del presidente para aplicar mano dura contra sus rivales políticos llevó a un aumento de la participación. Unas 50.000 personas estaban presentes este domingo por la tarde ante el Monumento de la Independencia, en el centro de Kiev, según estimaciones, frente a las 10.000 personas de la semana pasada.
La policía no había había facilitado estimaciones sobre datos de participación.
"Que a la policía no le de miedo golpear a su antiguo jefe demuestra que las autoridades están intentando asustar a quienes se atreven a levantarse contra ellas", dijo uno de los asistentes, Anatoliy Radyuk.
Los líderes opositores como el boxeador Vitali Klitschko consideran que el último estallido de violencia política muestra la importancia de seguir desplegando esfuerzos para derribar al equipo de Yanukovich.
"Esto muestra de nuevo que las protestas en las plazas de todo el país deben continuar", dijo Klitschko en un comunicado conjunto con los líderes opositores Arseniy Yatsenyuk y Oleg Tyagnybok.