ROMA.- Unos cuarenta integrantes del llamado movimiento de los "forconi" (horcas de los agricultores), que representa a italianos golpeados por la crisis, pasaron la noche en la basílica romana de Santa María la Mayor.
"Obviamente no nos iremos de aquí hasta que alguien nos escuche", advirtió Danilo Calvani, agricultor afectado por la crisis y que junto con unos cuarenta manifestantes ocupó ayer la basílica.
Calvani explicó que han pasado buena noche e incluso los responsables del templo les han dado de comer y de beber y relató que recibieron la visita del cardenal español Santos Abril y Castelló, arcipreste de la Basílica.
"Nos ha expresado su cercanía y ha sido muy emocionante", dijo.
Los manifestantes habían ayer pedido "asilo político" al Vaticano y ser recibidos por el Papa Francisco, para remarcar su protesta contra el Gobierno y la clase política.
La ocupación de la basílica, que está muy ligada a España ya que por una bula del Papa Inocencio X todos los reyes españoles son protocanónigos del templo, fue el acto final de una jornada de protestas de este grupo.
El "Movimento dei Forconi", que hace referencia a las horcas utilizadas en la agricultura, nació en 2012 en Sicilia cuando los agricultores y los transportistas protagonizaron una serie de protestas contra el Gobierno por las subidas del carburante.
El actual movimiento, más heterogéneo, ha convocado manifestaciones contra el Gobierno en toda Italia en las que últimamente se ha podido ver a miembros del partido de extrema derecha Forza Nuova y otros grupos afines.