BERLÍN.- Las fuerzas de seguridad de Alemania estiman que unos 300 jóvenes islamistas que residían en su país se han desplazado a Siria a luchar contra las tropas del régimen de Bashar al-Assad.
Así lo publica hoy el diario alemán "Bild", que cita fuentes policiales y destaca que al menos 16 de ellos han muerto en combate.
El popular rotativo alemán señala asimismo que muchos de estos radicales extremistas residían en el estado federado de Renania del Norte-Westfalia y que siete de los 16 fallecidos procedían de este "Land".
El de Berlín fue uno de los primeros Gobiernos occidentales en advertir que entre las fuerzas rebeldes que combatían a las tropas de Al-Assad había elementos radicales, por lo que se opuso a transferirles armas.
Alemania se ha mostrado sin embargo dispuesta a colaborar en la destrucción del arsenal químico de Al-Assad, único punto de este conflicto en el que se ha logrado un acuerdo internacional.
En casi tres años de guerra civil, más de 100.000 personas han muerto y varios millones se han visto forzados a abandonar sus hogares.