Reuters
LIMA.- El presidente del Perú, Ollanta Humala, le restó este viernes importancia al pedido del parlamentario derechista Héctor Becerril de que se le destituya por "incapacidad moral" al ceder supuestamente el poder a su esposa, Nadine Heredia.
"En democracia todo el mundo tiene derecho a hablar, todo el mundo tiene derecho a oír y todo el mundo tiene derecho a sacar conclusiones de las opiniones del resto", dijo Humala durante la inauguración de una obra pública, sin entrar al fondo del pedido de Becerril.
El planteamiento del parlamentario, quien habló a título personal y no encontró mayor eco, se presentó en momentos en que en el país hay malestar por la conducta de Humala, de quien se dice que cede a las presiones de Heredia y permite que sea ella quien lleve las riendas del poder.
Para los expertos, la iniciativa de Becerril tiene nulas posibilidades de concretarse por la correlación de fuerzas en el Congreso, donde el oficialismo y la oposición moderada superan en número a la oposición radical.
Humala no hizo esta vez referencia a Heredia, pero en otras ocasiones ha negado los insistentes rumores de que sea ella quien gobierne.
De otra parte, Humala afirmó que el aumento del sueldo mínimo, tema que degeneró esta semana en la renuncia del presidente del Consejo de Ministros, César Villanueva, no está en agenda, porque considera que su gestión ya cumplió con esta solicitud.
"En 2011, cuando iniciamos nuestra gestión, una de las principales preocupaciones fue el salario mínimo vital que tenía un retraso en comparación a la remuneración real. En seis meses cumplimos un compromiso con el país, un compromiso de campaña. Lo elevamos de 600 soles (unos 215 dólares) a 750 (unos 270), en dos tramos", dijo el mandatario a reporteros.
El presidente, en obvia referencia a Villanueva, quien fue el que puso sobre el tapete la supuesta alza del salario mínimo, consideró "irresponsable" plantear el tema "sin tener en cuenta que esto podría perjudicar a los trabajadores y dañar la formalidad con la que se viene desenvolviendo la pequeña y microempresa".
Además, añadió, esto "podría generar desempleo y que se retire a una gran cantidad de trabajadores que forman parte de las planillas".
El planteamiento de Villanueva fue públicamente corregido por Heredia y el ministro de Economía, Luis Miguel Castilla, lo que desencadenó la crisis que obligó a formar el mismo lunes un nuevo gabinete ministerial, presidido por el hasta entonces titular de Vivienda, René Cornejo.
Humala y su esposa han atacado verbalmente en las últimas horas a Villanueva, de quien aseguraron que tuvo una conducta infraterna al revelar asuntos del gobierno y al que acusaron de supuestamente responder a una agenda electoral propia.
El saliente jefe del gabinete, sin embargo, tuvo el apoyo de la oposición y de medios periodísticos que consideran que su renuncia es la comprobación de los rumores sobre los supuestos poderes excesivos de la primera dama.