WASHINGTON.- La corresponsal de CNN en Crimea (Ucrania), Anna Coren, denunció este viernes que los responsables de su hotel, desde donde la cadena estadounidense informa desde hace una semana sobre la crisis en ese país, la obligaron a dejar de emitir bajo amenaza de expulsarles del edificio.
"Realmente es muy raro, hace un par de horas el director de nuestro hotel nos dijo que teníamos que dejar de emitir y desmontar nuestro equipo o nos echarían. Preguntamos la razón, pero no nos la dieron. Muy inusual, básicamente nos dijo que paráramos de grabar o nos echarían", explicó la corresponsal en conexión telefónica con los estudios de CNN en EE.UU.
La periodista comentó asimismo que ella y su equipo tienen el "presentimiento" de que los directores del hotel han recibido "presiones", bien "de la milicia local o del nuevo gobierno de Crimea del que se sabe que es pro-ruso", sostuvo.
Además, la corresponsal relató que cuando algunas personas en Crimea oyen que son el equipo de la CNN, cadena estadounidense conocida en todo el mundo, detectan "un alto grado de hostilidad".
El presidente estadounidense, Barack Obama, comunicó el jueves a su homólogo ruso, Vladimir Putin, en una llamada telefónica las
sanciones decididas por su gobierno como respuesta a la intervención militar rusa en Crimea.
El mandatario insistió en que todavía existe "un camino para solucionar" la crisis en Ucrania por vías "diplomáticas", según informó la Casa Blanca en un comunicado.
La conversación se produjo después de que Obama pronunciara una breve declaración en la mañana del jueves en la que rechazó por "ilegal" el referéndum que prevén llevar a cabo en la península de Crimea los responsables pro-rusos de esta región autónoma para ratificar su adhesión a la Federación Rusa.