SIMFEROPOL.- Un millón y medio de electores de la península ucraniana de Crimea empezaron este domingo a votar en un referéndum sobre la anexión de este territorio a Rusia, una consulta con apoyo de Moscú pero considerada ilegal por los países occidentales.
Los habitantes de esta región del sur de Ucrania, donde siguen desplegadas fuerzas y milicias prorrusas, deben decidir entre unirse a la Federación Rusa o seguir en Ucrania con mayor autonomía.
Según todos los pronósticos el resultado será favorable a la anexión. Los colegios electorales cerrarán a las 20h00 (18H00 GMT) y los resultados definitivos se anunciarán el lunes por la mañana, indicó el presidente de la comisión electoral, aunque este domingo se conocerán las estimaciones.
Periodistas de la agencia AFP vieron a los primeros electores entrar en los colegios electorales de Simféropol, la capital de la región. También vieron a unas veinte personas votar en Bajchisarai, la principal ciudad de la comunidad musulmana tártara de Crimea, cuyos líderes pidieron boicotear el referéndum.
Crimea fue históricamente parte de Rusia hasta que la Unión Soviética la cedió a Ucrania en 1954, por decisión de Nikita Jrushchov. Sin embargo, Moscú mantuvo en el puerto crimeo de Sebastopol la base de su flota en el Mar Negro.
La población es en su mayoría rusófona y favorable a la anexión. Por su parte las minorías ucraniana y tártara, que representan el 37% de la población, pidieron boicotear el referéndum.
Los electores deben optar entre "la reunificación con Rusia como miembro de la Federación Rusa" o la vuelta a un estatuto de 1992, que nunca fue aplicado, que da una autonomía más amplia a la región.
La opción de mantener el estatus actual dentro de Ucrania no forma parte de las opciones.