Jay Carney, portavoz de la Casa Blanca.
APWASHINGTON.- El Gobierno de Estados Unidos aseguró hoy que la comunidad internacional no reconocerá jamás "el intento de anexión" de Crimea a Rusia, la cual definió como "una amenaza a la paz" internacional y "claramente ilegal".
Después de que las autoridades crimeas y rusas firmaran hoy un tratado de incorporación de la península ucraniana a la Federación Rusa, el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, afirmó que las acciones del Gobierno ruso son "una clara violación de la legislación internacional" y una "amenaza a la paz".
El vocero señaló que los pasos dados por el Gobierno del presidente ruso, Vladimir Putin, tendrán consecuencias y que con ese objetivo el mandatario estadounidense, Barack Obama, se reunirá la próxima semana con sus socios del G7 (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido).
La Casa Blanca volvió a recordar que el Gobierno estadounidense baraja nuevas sanciones como represalia por la ocupación militar y anexión rusa de Crimea, después de que este lunes anunciara la congelación de activos de cuatro líderes ucranianos (entre ellos el ex presidente Viktor Yanukovich) y de siete funcionarios rusos.
No obstante, Carney no detalló el alcance de las nuevas sanciones previstas ni cuándo se podrían anunciar.
"Las acciones tomadas contra once personas son parte de un proceso que continuará por la persistente indisposición de Rusia de proceder de un modo consistente con la ley internacional", aseguró Carney, que repitió en varias ocasiones que el "costo aumentará" para Rusia por su actitud.
Carney recordó también que los preparativos para la cumbre del Grupo de los Ocho (G8), integrado por los del G7 más Rusia, que iba a celebrarse este mes de junio en la localidad rusa de Sochi, han quedado suspendidos.