Reuters
SYDNEY.- El vehículo autónomo submarino Bluefin-21, cuyo cometido es rastrear el fondo de una zona del Índico en busca del avión malasio desaparecido el 8 de marzo con 239 personas, finalizó el miércoles su primera misión completa después de abortar las dos anteriores, informó una fuente oficial.
"Esta noche el Bluefin-21 completó la misión de búsqueda y actualmente se está planificando la siguiente misión", agrega en un comunicado el Centro de Coordinación de Agencias Conjuntas.
Las misiones bajo el agua comenzaron el lunes, no obstante, el aparato abortó el primer intento tras sobrepasar el límite de profundidad para el que está programado.
Los técnicos recogieron al minisubmarino autónomo en su segundo trabajo para rectificar un problema técnico.
"El Bluefin-21 rastrea aproximadamente unos 90 kilómetros cuadrados hasta la fecha, los datos de la última misión están siendo analizados", indica el organismo de búsqueda.
El minisubmarino, que viaja a bordo del buque australiano Ocean Shield, espera cartografiar parte del fondo marino, a una profundidad máxima de 4.500 metros, en busca de las cajas negras o restos del avión de Malaysia Airlines desaparecido.
Las autoridades recogieron el pasado domingo una muestra de una mancha de aceite para su posterior análisis, que ya llegó a los laboratorios de la ciudad australiana de Perth, para determinar si pertenece o no a la aeronave desaparecida hace más de cinco semanas.
Además, durante esta jornada diez aviones militares, dos civiles y 11 buques rastrean una zona que se redujo hasta los 40.349 kilómetros cuadrados, a 2.170 kilómetros al noroeste de Perth, en misiones de rastreo visual en busca de partes de fuselaje del avión.
El vuelo MH370 de Malaysian Airlines despegó de Kuala Lumpur en la madrugada del pasado día 8 de marzo con 239 personas y tenía previsto llegar a Beijing seis horas más tarde.
El avión desapareció de las pantallas de control de radar a los 40 minutos de su despegue y cambió de rumbo en una "acción deliberada", según las autoridades malasias, para cruzar el Estrecho de Malaca en dirección contraria a su trayecto inicial.
Viajaban a bordo 153 chinos, 50 malasios, siete indonesios, seis australianos, cinco indios, cuatro franceses, tres estadounidenses, dos neozelandeses, dos ucranianos, dos canadienses, un ruso, un holandés, un taiwanés y dos iraníes que utilizaron los pasaportes robados a un italiano y un austríaco.