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SAO PAULO.- La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, que en 2009 fue operada por un cáncer linfático, se sometió a una evaluación médica, cinco años después del tratamiento con el que logró extirpar la enfermedad, según fuentes oficiales.
La mandataria acudió este jueves a una consulta en Sao Paulo con su médico, Roberto Kalil Filho, a quien le entregó el resultado de exámenes que se practicó el 31 de marzo pasado en el Hospital de las Fuerzas Armadas en Brasilia, según un comunicado de la Presidencia.
La jefa de Estado "realizó nuevas evaluaciones de rutina al cumplir el quinto año de seguimiento clínico desde el inicio de su tratamiento contra el cáncer", de acuerdo con la nota del Palacio de Planalto.
Los exámenes a que se sometió en todo ese período han dado resultados considerados como “normales” por los especialistas que la atienden.
Kalil Filho fue el mismo médico sometió a Rousseff, de 66 años, a una cirugía en abril de 2009 para retirarle un nódulo en un ganglio linfático de una axila, cuya biopsia permitió diagnosticar el linfoma.
La entonces ministra de la Presidencia y favorita de Luiz Inácio Lula da Silva para sucederle en la jefatura del Estado, pasó por un exitoso tratamiento preventivo de quimioterapia seguido por radioterapia que garantizó la eliminación definitiva del cáncer.
La gobernante se somete a exámenes periódicos desde entonces para controlar una posible reaparición de la enfermedad.
La nueva evaluación se produjo a seis meses de las elecciones presidenciales de Brasil, en las que Rousseff puede aspirar a la reelección, algo que la mandataria aún no confirmó pero que sus correligionarios dan como un hecho.