Reuters
KUALA LUMPUR.- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, visitó este domingo la mezquita nacional de Kuala Lumpur dentro de la gira asiática que también incluye Japón, Corea del Sur y Filipinas con el fin de reforzar su presencia en la región.
Obama, que llegó a bordo del Air Force One procedente de Seúl, tiene previsto celebrar un almuerzo de trabajo con el primer ministro malasio, Najib Razak, con el que también comparecerá en rueda de prensa.
Luego se desplazará al Centro de Innovación y Creatividad donde Malasia acoge un Foro de Emprendedores y posteriormente participará en un encuentro con jóvenes estudiantes de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (Asean).
Al finalizar este encuentro el presidente estadounidense tiene previsto reunirse con representantes de la sociedad civil de Malasia.
Grupos de derechos humanos como Human Rights Watch y Amnistía Internacional solicitaron a Obama que se reúna con el líder de la oposición malasia, Anwar Ibrahim, quien apeló a una condena por sodomía en un proceso calificado de persecución política.
A bordo del avión presidencial, el consejero adjunto de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Ben Rhodes, afirmó ayer que Obama está comprometido con el proceso democrático en Malasia pero que no acostumbra a reunirse con los líderes opositores en viajes oficiales.
Sin embargo, Rhodes indicó que la consejera de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Susan Rice, se reunió con Anwar para mostrar que Estados Unidos tiene una relación "abierta" con Malasia.
"Apoyamos el proceso político en Malasia. Apoyamos el aumento de las prácticas democráticas en Malasia. Y estamos preocupados cuando hemos visto restricciones en el espacio público o cualquier esfuerzo para limitar las actividades de la sociedad civil", declaró Rhodes.
"Y eso es ciertamente algo que el presidente mencionará en sus comentarios", agregó.
En esta gira asiática que comenzó el miércoles, el presidente estrechó lazos con Japón y Corea del Sur, históricos aliados, y abordó la seguridad marítima en la región, sometida a las tensiones con China, así como las amenazas de Corea del Norte y, también, la crisis en Ucrania.
El lunes, el inquilino de la Casa Blanca viajará a Filipinas, donde celebrará un encuentro con el presidente, Benigno Aquino, y el martes concluye su gira y regresa a Washington.