JOHANNESBURGO.- El Presidente electo de Sudáfrica, Jacob Zuma, fue investido hoy como jefe del Estado del país austral por otros cinco años, en una ceremonia celebrada en la sede del Gobierno en Pretoria a la que acudieron más de 40 líderes internacionales.
En el poder desde 2009, Zuma tomó posesión de su cargo tras imponerse su partido, el oficialista Congreso Nacional Africano (CNA), en las elecciones generales del pasado 7 de mayo con un 62,15 por ciento de los votos.
El Parlamento sudafricano designó esta semana presidente a Zuma, que comienza hoy oficialmente su segundo y último mandato.
"Prometo sincera y solemnemente hacer todo lo que haga avanzar a la República y oponerme a todo lo que pueda dañarla", declaró Zuma desde el estrado.
El presidente electo juró su cargo ante el juez del Tribunal Constitucional, Mogoeng Mogoeng, después de la lectura del preámbulo de la Constitución sudafricana, y de que tres helicópteros del Ejército sudafricano hicieran ondear en el cielo la bandera del país.
La ceremonia contó con la presencia del vicepresidente brasileño, Michel Temer, que en una entrevista exclusiva concedida a Efe afirmó que su Gobierno está "preparadísimo" para afrontar las protestas contra el mundial de fútbol del próximo junio.
También asistieron, entre otros dignatarios africanos, el presidente de Nigeria, Goodluck Jonathan, y su homólogo zimbabuense, Robert Mugabe, que recibió una cerrada ovación de los asistentes que llenaban el Anfiteatro Nelson Mandela en la sede del Gobierno sudafricano, los Union Buildings.
Miles de personas siguieron la ceremonia a través de grandes pantallas de televisión habilitadas en una de las praderas contiguas al palacio gubernamental.
Espectáculos de música y baile amenizaron la espera durante toda la mañana.
A sus 72 años, Zuma inicia el que será -por imperativo legal- su ultimo mandato con la creación de empleo y el crecimiento como retos, después de cinco años marcados por los escándalos de corrupción en los que se ha visto implicado.