La reina Sofia de España.
AFP
NUEVA YORK.- La reina Sofía manifestó hoy estar "tranquila" tras
la abdicación de su esposo, el rey de España Juan Carlos I, y ante la próxima coronación de su hijo, el príncipe Felipe.
La consorte del monarca hispano se refirió al tema durante una visita a Nueva York, en su último viaje en tal calidad fuera de su país.
Saltándose el protocolo habitual, Sofía atendió a los medios de comunicación que se encontraban congregados a su salida de la sede del organismo, y aseguró "estar tranquila" tras la abdicación de su esposo y la próxima coronación de su hijo.
"El cambio va a ser totalmente tranquilo. La continuidad va a seguir con el príncipe. No va a haber ningún problema. Estamos todos en la misma idea", sentenció.
Al ser preguntada por la princesa Letizia, la reina Sofía le aconsejó "que siga igual".
"Ella es muy competente y encantadora y la quiero mucho", aseguró.
Respecto a una pregunta sobre la petición de un referendo para definir el futuro de la monarquía hispana, la reina desestimó emitir una opinión. "Yo no entro en eso", señaló.
Mensaje por niñas secuestradas
La reina Sofía comenzó su agenda oficial con una intervención ante la Junta Ejecutiva del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y durante su discurso recordó a las más de 200 niñas que desde el pasado 14 de abril permanecen secuestradas en Nigeria por el grupo terrorista Boko Haram.
"Hoy tenemos en nuestro pensamiento a los niños y niñas de África. Deseo, en particular, dedicar unas palabras de emocionado recuerdo a las niñas secuestradas en Nigeria. Quiero decir a sus padres que sus hijas son nuestras hijas, su dolor es nuestro dolor y su esperanza es la nuestra", aseguró.
Insistió en la necesidad de seguir luchando por los derechos de los niños y recordó que a pesar de los esfuerzos realizados durante décadas, "el derecho a la educación no está todavía garantizado en muchas partes del mundo".
Tras terminar su intervención, la reina mantuvo un breve encuentro con el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, y más tarde almorzó con un grupo de mujeres embajadoras ante la ONU.
