Las teorías con mayor apoyo sobre el misterioso origen de los gitanos ubican su cuna en India.
AgenciasNUEVA DELHI.- Una nueva tesis sobre el origen de los gitanos que sitúa su primera tierra en India sugiere que este antiguo pueblo errante podría tener una relación con el culto al dios Krishna.
El origen indio de estas comunidades es una hipótesis generalmente aceptada por los antropólogos, pero todavía subsiste el misterio sobre el motivo de su milenaria emigración.
La última teoría, de corte teocrático, vincula a los primeros gitanos con el hombre-dios que es el centro de un culto muy popular en el gigante asiático y en otros lugares del planeta.
El filántropo indio Umang Utheesing, perteneciente a una antigua familia del estado de Gujarat, afirma que localizó la "cuna" de las "tribus gitanas" en esa zona situada al oeste del subcontinente.
"Eran nómadas y ganaderos, como Krishna, y seguían la misma tradición que la divinidad, que después de llevar a pastar al ganado se dedicaba a cantar, bailar y divertirse", señala el estudioso.
También subraya que el dios aparece usualmente en la iconografía con aspecto festivo y dos cayados, que empleaba para pastorear y para practicar el baile denominado "Raas", que guarda fuerte similitud con el flamenco.
Antigua presencia en Persia
Utheesing, quien preside una fundación de cultura en Gujarat, argumenta que la emigración original de quienes darían origen al pueblo gitano se produjo hace milenios. Las tribus habrían emprendido su largo viaje originalmente con el propósito de comerciar, añade.
Entre los argumentos históricos que esgrime para sustentar su tesis cita al autor Hamza al- Isfahaní, un historiador persa del siglo X que cita la presencia en la corte de un grupo de unos 20.000 indios que se dedicaban a las artes escénicas y el entretenimiento.
Las teorías que gozan actualmente de mayor aceptación los relacionan, no obstante, con el grupo de los "intocables", el más bajo del sistema de castas, lo que estaría detrás de su voluntad de emigrar para evitar la opresión.
El investigador rechaza esta tesis y asegura que este pueblo era formado originalmente por personas de distintos orígenes y que en el tiempo de su primera emigración no existía el sistema de castas tal como se lo conoce hoy.
Paradójicamente, miles de años después de este supuesto éxodo de los gitanos, la deidad con la que -según esta tesis- originalmente estuvieron ligados emprendió su propio periplo a través del mundo, sobre todo a partir de la década de 1960, convirtiendo la adoración a Krishna en uno de los cultos religiosos más extendidos en el planeta.