El primer ministro Shinzo Abe.
ReutersTOKIO.- El gobierno japonés levantará algunas de las sanciones unilaterales que impuso a Corea del Norte tras el buen desarrollo de las negociaciones sobre el secuestro de japoneses durante la guerra fría.
El primer ministro Shinzo Abe dijo que su gobierno considera que Pyongyang, que aceptó reabrir el caso del secuestro de ciudadanos japoneses en Corea del Norte, demostró voluntad de resolver este problema por lo que es necesario un gesto de reciprocidad.
"Hemos decidido que se estableció un mecanismo sin precedentes para tomar decisiones nacionales. En consecuencia, levantaremos parte de las sanciones adoptadas por Japón", dijo a la prensa.
La medida se produce después de que ambas partes se reunieron en Beijing para averiguar el paradero de docenas -e incluso centenares- de personas que Japón alega que fueron secuestradas por espías norcoreanos para enseñar a sus agentes el idioma y las costumbres japonesas durante las décadas de 1970 y 1980.
Las sanciones japonesas son adicionales a las que impuso el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas tras los ensayos nucleares y de misiles realizados por Pyongyang.
Según la prensa, Tokio eliminará la exigencia de que los norcoreanos que visiten Japón traigan consigo más de 100.000 yenes (1.000 dólares) en metálico y pondrá fin a la prohibición de atracar en puertos japoneses para algunos buques norcoreanos.
La relación entre Japón y Corea del Norte, que no mantienen relaciones diplomáticas formales, se tornó tensa durante décadas.
Corea del Norte reconoció en 2002 que había secuestrado a 13 ciudadanos japoneses para formar a sus espías.Cinco de los secuestrados pudieron regresar a Japón pero las autoridades norcoreanas dijeron que otros ocho han muerto, aunque no han presentado evidencias que lo confirmen, lo que ha levantado ampollas en Japón.
El asunto es muy sensible en Japón donde existen las sospechas de que quizá centenares de personas corrieron la misma suerte.