LIMA.- Perú, a pesar de que es uno de los países más afectados por el cambio climático, busca convertir este escenario en una opción turística para difundir las alternativas de adaptación que se desarrollan en el Parque Nacional Huascarán, una región de climas diversos, bosques andinos y nieves consideradas hasta hace pocos años "eternas".
El Parque Nacional Huascarán, que administra el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp), se ubica en la región nortina de Áncash y es considerado una de las principales alternativas para la actividad turística en Perú, por sus espacios naturales, rica historia y legado cultural, así como las posibilidades para los deportes de aventura.
Por ese motivo, el Sernanp ha presentado una renovada Ruta del Cambio Climático del nevado Pastoruri, una montaña considerada durante décadas como un espacio natural de gran atractivo turístico, por la facilidad para acceder a sus zonas cubiertas de nieve, que en los últimos años han disminuido por efecto del clima.
El Sernanp informó en una nota de prensa de que ante la disminución del flujo de visitas por el retroceso de su masa glaciar, ha decidido lanzar una propuesta en un área natural protegida, de las 77 que tiene Perú, que también exhibe restos fosilizados de flora y fauna datados "hace miles o tal vez millones de años".
"Esto se conjuga perfectamente con los servicios ambientales que presta el Parque Nacional Huascarán, entre ellos su potencial hidrológico, lo cual genera cantidad y calidad de agua en la zona", indicó el organismo.
El cambio climático ha convertido a la Cordillera Blanca, en la región Áncash, en "un espacio altamente vulnerable", al punto que en 33 años ha perdido más del 27 % de su superficie glaciar.
Sin embargo, el Sernanp remarca que "al contrario de todo pesimismo" el cambio climático ha generado un gran interés turístico y se considera que permitirá reactivar oportunidades de desarrollo para poblaciones como la comunidad campesina de Cátac, que se encuentra en la zona adyacente al área natural protegida.
El nuevo circuito turístico comienza en el Centro de Interpretación de la Ruta del Cambio Climático, un local donde se usan maquetas, paneles y salas de vídeo para explicar al visitante los efectos de lo sucedido en el país.
"La idea es generar una corriente de información sobre esta nueva propuesta, donde el visitante pueda observar donde se encontraba el glaciar hace varios años atrás y la ubicación de lo que fue la famosa y muy conocida cueva de hielo", acotó el Sernanp.
Además, se ha instalado un mirador para que los visitantes puedan "echar un vistazo a los efectos del cambio climático, reflejados en el retroceso de glaciar".
La propuesta permite recorrer la subcuenca del río Pachacoto, la "laguna anciana" de Patococha, los paisajes de montaña, un laboratorio natural para purificar agua y las puyas de Raimondi, una planta de las alturas andinas que puede alcanzar varios metros de altura.
Asimismo se ofrece un recorrido por las lagunas que se han formado por el retroceso de los glaciares que, según indicó el organismo, entre el 2001 y el 2013 han incrementado 44 veces su tamaño.
La nueva ruta concluye con la visita al nevado Pastoruri y al Centro de Interpretación, un local donde se muestran restos fósiles que evidencian la presencia de dinosaurios en esa zona del país.
La propuesta busca aprovechar que las empresas turísticas más importantes del mundo están invirtiendo "en un mercado sofisticado, del que no cualquiera puede ser parte" y que las áreas naturales de Perú "se han convertido en una oportunidad turística que nos ofrece la adaptación al cambio climático."
La iniciativa ha sido un trabajo conjunto entre el Sernanp, el Ministerio de Turismo a través del Plan Copesco, la Municipalidad Distrital de Cátac y la comunidad campesina de Cátac.