Al grupo extremista se le atribuye la destrucción de lugares históricos del país, como la tumba de Nebi Yunus, o profeta Jonás, en Mosul, en julio pasado.
EFEIRBIL, IRAK.- Combatientes del grupo extremista Estado Islámico ampliaron los territorios bajo su control al capturar el domingo dos localidades en el norte de Irak, de donde expulsaron a las fuerzas de seguridad curdas, dijeron autoridades y lugareños.
Debido a los nuevos avances de los extremistas suníes, miles de vecinos han huido de las localidades de Zumar y Sinjar, que tienen diversidad religiosa, hacia la región autónoma curda en el norte, dijo la ONU. Algunos desplazados quedaron varados en una zona escabrosa abierta, agregó.
El gobernador de Mosul, Atheel al-Nujaifi, que huyó hacia la región autónoma predominantemente curda cuando el Estado Islámico y sus combatientes suníes tomaron en junio el control de Mosul, la segunda ciudad más grande de Irak, dijo que las dos localidades cayeron después de intensos enfrentamientos que comenzaron el día anterior.
Un habitante de Sinjar dijo que los extremistas destruyeron con explosivos un pequeño lugar sagrado chií y dos santuarios yazidíes.
Los yazidíes son una minoría religiosa de habla curda. Un habitante de Zumar dijo que los atacantes capturaron al menos dos yacimientos petrolíferos pequeños. Ambos solicitaron no ser identificados por temor a represalias.
La misión de la ONU en Irak (UNAMI), informó que unos 200.000 civiles, en su mayoría yazidíes, han huido hacia una montaña cercana pero corren peligro porque los rodean los extremistas.
Irak enfrenta su peor crisis desde el retiro en 2011 de los efectivos estadounidenses. El Estado Islámico capturó en una ofensiva relámpago a principios de año grandes franjas de territorio en el oeste y norte del país.
Cuando el Estado Islámico capturó en junio las ciudades de Mosul y Tikrit, prácticamente sobrevino el derrumbe de las fuerzas de seguridad iraquíes. En la mayoría de los casos, policías y soldados simplemente emprendieron la huida y dejaron atrás arsenales de armas pesadas.
El grupo Estado Islámico ha instalado un califato en una gran zona que se extiende entre las fronteras de Irak y Siria.
Según diversas versiones, la lucha en Zumar y Sinjar se extendió el domingo a la cercana presa Mosul.
Sin embargo Jabar Yawer, portavoz de la Peshmerga, el mando militar curdo en la región semiautónoma de Irak, dijo la noche del domingo que las fuerzas curdas mantienen el control de la presa, al destacar que el Estado Islámico no ha logrado capturarla.
Jen Psaki, portavoz del Departamento de Estado norteamericano, dijo que Estados Unidos "sigue de cerca la situación" en el norte de Irak y le "preocupa profundamente la seguridad de los civiles en la zona".