BERLÍN.- Los servicios secretos alemanes estiman que más de 400 yihadistas que luchan en las filas del Ejército Islámico (EI) en Irak y Siria han viajado a la zona desde Alemania y que entre ellos hay una veintena de ex soldados del ejército federal.
Según una información que publica el semanario "Der Spiegel", los servicios militares de contraespionaje consideran que el islamismo es un problema creciente en el ejército alemán.
No hace mucho se consiguió evitar el viaje a las zonas de guerra de un suboficial que había sido expulsado del ejército por sus creencias islamistas, tras una investigación de los servicios de contraespionaje.
Los ex soldados, destaca la revista, son especialmente valiosos para el EI por sus conocimientos militares, de los que carecen buena parte de los combatientes extranjeros.
En una entrevista en el radio pública alemana, el presidente de los servicios de inteligencia en el exterior, Hans-Georg Maaßen, informó de que tienen constancia de que cinco de los yihadistas que han viajado a Siria e Irak desde Alemania han protagonizado ya atentados suicidas.
Alemania, que hoy tomará una decisión sobre el envío de armas a los kurdos que lucha contra el EI en el norte de Irak, "debe considerar que esas personas regresan y comenten atentados", advirtió Maaßen.
No obstante, subrayó que se trata de un "alto peligro abstracto", ya que no hay informaciones concretas sobre posibles atentados en el país.
El Gobierno de Merkel ha avanzado que no tiene previsto elevar el nivel de alerta en el país, una decisión que sí ha adoptado el Reino Unido.