LONDRES.- Amnistía Internacional (AI) difundió hoy imágenes de satélite que, según afirma, prueban la implicación rusa en el conflicto en Ucrania al documentar el traslado de equipamiento militar dentro de la frontera ucraniana.
En un comunicado, la organización denuncia además crímenes de guerra cometidos por ambas partes enfrentadas, tanto los grupos separatistas apoyados por el Estado ruso como las milicias que combaten junto con las fuerzas regulares ucranianas.
Las imágenes satelitales distribuidas por Amnistía, que considera que existe "un conflicto armado internacional", muestran el establecimiento de posiciones de artillería dentro de la frontera ucraniana entre el 13 y el 29 de agosto.
Primero se detectan unidades de artillería Howitzer D-30 122-mm apuntando hacia el oeste y dos de las posiciones, precisa AI, tienen un vehículo de apoyo y "lo que parecen búnkers". El 29 de agosto, pueden verse seis vehículos anfibios blindados, posiblemente BRDM-2, señala la organización.
Las imágenes revelan otra posición de artillería en un campo al noreste del primero, también en territorio ucraniano, y el 26 de agosto aparecen seis Howitzer de autopropulsión relativamente avanzados, posiblemente 2S19 Msta-S 152-mm, que apuntan hacia el suroeste, presumiblemente donde está el Ejército ucraniano.
Entre el 26 y el 29 de agosto, la artillería se ha movido a posición de fuego apuntando al oeste y, el 29 de ese mes, se ven numerosos vehículos militares en la zona.
"Estas imágenes de satélite, junto con los informes de tropas rusas capturadas dentro de Ucrania y testimonios sobre tropas rusas y vehículos cruzando la frontera no dejan duda de que esto es ahora un conflicto internacional", según el secretario general de AI, Salil Shetty.
Shetty visitará del 7 al 8 de septiembre Kiev y del 9 al 10 de septiembre Moscú, donde expresará la inquietud de la organización por las violaciones de derechos humanos perpetradas en Ucrania.
"Todas las partes en este conflicto han demostrado desprecio por la vida de los civiles y están violando sus obligaciones internacionales", afirma Shetty en el comunicado. "Nuestras pruebas demuestran que Rusia está alentando el conflicto, tanto mediante interferencia directa como a través de su apoyo a separatistas en el este", asegura, para añadir: "Rusia debe detener el suministro continuado de armas y otro tipo de apoyo a la fuerza insurgente, implicada en graves violaciones de los derechos humanos".
Los investigadores de AI en el este de Ucrania han documentado numerosos casos de ataques de artillería indiscriminados, secuestros, tortura y asesinatos.
Las personas entrevistadas por la ONG han revelado que el Ejército ucraniano sometió a sus vecindarios a ataques severos e indiscriminados, lo que podría constituir crímenes de guerra, y también relatan torturas y asesinatos de los separatistas.
Amnistía "también ha recibido informes creíbles de secuestros y palizas perpetradas por batallones voluntarios que operan junto con las fuerzas armadas regulares ucranianas".
LA organización pide a las autoridades ucranianas que investiguen las denuncias de violaciones de la ley humanitaria internacional y que procesen a las personas responsables de crímenes de guerra tanto civiles como en la cadena de mando. "Los civiles en Ucrania merecen protección y justicia -asevera Shetty-. Sin una investigación exhaustiva e independiente, existe el riesgo de que los ucranianos lleven las cicatrices de esta guerra durante generaciones".