Reuters
LOS ANGELES.- Al menos 35.000 morsas corren el riesgo de morir en una remota playa de Alaska donde quedaron atrapadas, en un fenómeno atribuido al deshielo en el Artico, debido al cambio climático, dijeron expertos el miércoles.
Inicialmente fueron censados unos 1.500 animales en la playa, pero en los últimos días se multiplicaron exponencialmente.
"Nuestra estimación más aproximada es 24 veces mayor", ahora, dijo Megan Ferguson, del servicio aéreo de control de los mamíferos marinos del Artico.
Las morsas "quedan varadas en un espectáculo que se ha hecho común en los últimos seis a ocho años, como consecuencia del calentamiento climático", señala el Servicio Geológico de EE.UU. (USGS), en un comunicado.
En verano el hielo marino se retira lejos hacia el norte de las aguas continentales del mar de Chukchi, en aguas de Estados Unidos y Rusia, una condición que no se registraba una década atrás, precisan expertos.
"Durante sus períodos normales de descanso luego de alimentarse en el mar, las focas simplemente se amontonan en la costa", agregó.
En los últimos años, distintas organizaciones han denunciado los negativos efectos sobre la vida natural del cambio climático, vinculado por muchos científicos al aumento en la atmósfera de Gases de Efecto Invernadero (GEI) originados por la actividad humana.
En el Ártico, las poblaciones amenazadas abarcan desde los osos polares a los zorros árticos y diversas especies de peces y mamíferos marinos.