TOKIO.- Los equipos de rescate retomaron del sábado a primera hora las operaciones en la cima del volcán japonés Ontake, el día en que se cumple una semana de la trágica erupción que ha dejado hasta el momento 47 muertos y 16 desaparecidos.
La cadena pública NHK informó de que varios helicópteros de las Fuerzas de Auto Defensa (Ejército) depositaron en la cima a unos 170 efectivos, que expandirán su radio de búsqueda por la falda del volcán a zonas alejadas de las rutas trazadas para senderismo.
El objetivo es localizar a los 16 montañeros que permanecen ilocalizables desde la erupción, al tiempo que no se descarta que pueda haber más desaparecidos ante la dificultad para contabilizar el número de excursionistas que subieron el Ontake el pasado día 27 desde las distintas estaciones de acceso.
El Ontake, el segundo mayor volcán de Japón con 3.067 metros de altura y ubicado a unos 100 kilómetros de la ciudad de Nagoya, entró en erupción el pasado sábado mientras centenares de montañeros se encontraban en sus faldas y en la cima haciendo senderismo.
Se sabe que unos 250 pudieron abandonar la zona por su propio pie o fueron evacuados, 69 de los cuales sufrieron heridas de diversa gravedad, la mayoría por golpes, fracturas y quemaduras.
Además de la ceniza escupida por el volcán y depositada sobre la cima, lo que complica la movilidad y la visibilidad de los equipos de rescate, los operativos trabajan hoy con celeridad ante la llegada a la región del tifón Phanfone.
Phanfone, que se desplaza desde el suroeste, ha aminorado su velocidad de aproximación en las últimas horas, lo que ha brindado algo más de tiempo al operativo para permanecer en la zona.
Independientemente de que pueda haber más víctimas en la cima del Ontake, su erupción es ya la que más pérdidas humanas ha provocado en Japón desde 1926, cuando hubo 144 muertos y unos 210 heridos por el estallido del monte Tokachi, en la isla de Hokkaido, en el norte del país.
