LoONDRES.- Las autoridades del Reino Unido pondrán hoy en marcha un simulacro a nivel nacional para probar la eficacia de sus protocolos de actuación ante la posible aparición de un brote del virus del ébola en este país.
En el ejercicio simulado, que durará ocho horas, participarán los ministros del Gobierno que dirige el conservador David Cameron, profesionales médicos de hospitales y el servicio de ambulancias del Departamento de Salud Público de Inglaterra.
También se contará con la participación de actores y actrices que fingirán padecer los síntomas del ébola, al tiempo que personal sanitario especializado podrá a prueba los trajes de alta protección contra el virus.
Asimismo, el Ejecutivo británico celebrará una reunión del comité de emergencias Cobra que estará presidido por el ministro de Sanidad, Jeremy Hunt.
El simulacro forma parte del paquete de medidas de contingencia anunciadas esta semana por Cameron para reforzar la seguridad del Reino Unido contra un virus que ya ha matado a más 4.000 personas en África occidental.
El primer ministro confirmó el jueves que "se aumentarán los controles" en aeropuertos y en la terminal del tren del Canal de la Mancha para detectar posibles casos de ébola en pasajeros procedentes de Liberia, Sierra Leona y Guinea.
Estos controles, que se aplicarán en los aeropuertos de Heathrow y Gatwick y en las estaciones del Eurostar, conllevarán analizar el historial de viaje de estos pasajeros de regiones afectadas y, en algunos casos, pueden implicar exámenes médicos.
El Reino Unido respondió así a la alarma internacional causada por la propagación del ébola, después de que solo unos días antes descartara estos controles fronterizos adicionales al considerar que eran innecesarios porque el riesgo en este país era bajo.
Sin embargo, la presión ejercida por parte del Parlamento británico obligó al Gobierno a introducir nuevas medidas para tranquilizar a la opinión pública.
En el Reino Unido, los vuelos directos a Guinea, Sierra Leona y Libera, los países más afectados por el virus, están suspendidos desde el pasado agosto, por lo que los pasajeros procedentes de estas zonas llegarán a Londres a través de otros territorios.
Asimismo, el Reino Unido ha aumentado esta semana la ayuda a las regiones de África occidental afectadas por el estallido del virus, con el envío a Sierra Leona de 750 soldados, un barco hospital y tres helicópteros.