MURSITPINAR.- Los yihadistas del grupo Estado Islámico (ISIS) siguen avanzando en Siria, sobre todo en el norte del país, pese a los ataques aéreos de la coalición militar internacional, cuyos comandantes se reúnen este martes en Washington.
ISIS ya ocupa la mitad de Kobane, la ciudad kurdo-siria en la frontera con Turquía, escenario desde hace días de una lucha feroz entre yihadistas y combatientes kurdos.
En Irak, el grupo extremista suní también se extiende en el oeste del país donde está cerca de conquistar la provincia de Al Anbar, tras una serie de ofensivas que debilitaron las posiciones del ejército.
En el aspecto humanitario, la ONU empezó a reducir en un 40% su ayuda alimentaria para 4,2 millones de personas en Siria por culpa de problemas presupuestarios, indicó este lunes a la AFP la directora adjunta del Programa alimentario mundial (PAM).
Los yihadistas se instalaron por primera vez en el centro de Kobane desde el principio de su ofensiva contra los combatientes kurdos que tratan de resistir frente a tropas más numerosas y mejor armadas, según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).
"Antes venían del este, avanzaban y retrocedían, pero esta vez están bien instalados (en el centro). Controlan la mitad de la localidad", indicó Rami Abdel Rahman, director del OSDH.
ISIS ya rodea "la ciudad desde tres lados distintos", aseguró a la AFP Feyza Abdi, una concejal de Kobane refugiada en Turquía.
Este martes, los combates hacían estragos en el norte de la ciudad, en los barrios que llevan al puesto fronterizo turco de Mursitpinar. La coalición volvió a bombardear la zona, según un periodista de la AFP que cita a varios testigos en el lado turco de la frontera.
Reunión de coalición
Este martes, se estudiará la situación en una reunión militar de la coalición internacional antiyihadista en Washington, que contará con la presencia del presidente estadounidense Barack Obama.
Obama aseguró estar deseoso de "debatir medidas adicionales" para "debilitar y finalmente destruir a ISIS".
No quiso, sin embargo, evocar los puntos de divergencia entre los miembros de la coalición, como la creación de una zona desmilitarizada en la frontera entre Siria y Turquía, una medida que reclama Ankara, que apoya París, pero que "no está a la orden del día" para Washington.
El portavoz del Estado Mayor del ejército francés, el coronel Gilles Jaron, confió que París buscaba "participar en la elaboración de un plan de acción común de ámbito regional" y "acordar los grandes aspectos estratégicos" contra el ISIS.