MURSITPINAR.- Más de mil combatientes rebeldes sirios llegarán para reforzar la defensa de la ciudad fronteriza de Kobane contra los yihadistas, un anuncio de Turquía que fue recibido este viernes con desconfianza por los kurdos locales.
Los kurdos que se baten encarnizadamente contra los combatientes de ISIS (Estado Islámico) desde hace semanas esperan por el contrario la llegada de más combatientes de su etnia, los peshmergas, provenientes de Irak, la semana que viene.
Esos peshmergas -un máximo de 200, según un portavoz de la región autónoma kurda de Irak- pasarán por Turquía, que autorizó su tránsito para llegar a Kobane, justo en el lado sirio de la frontera.
El presidente turco Recep Tayyip Erdogan había afirmado que el principal partido kurdo sirio (Partido de la Unión democrática, PYD), cuyo brazo armado defiende Kobane, había aceptado que 1.300 hombres del Ejército Sirio Libre (ASL), opositores al régimen de Basahr Al Assad, llegaran también a Kobane.
Dos responsables kurdos sirios mostraron su escepticismo. Según Nawaf Khalil y Bulat Jan, portavoces respectivamente del PYD y de su brazo armado, esos rebeldes sirios deberían en cambio abrir otros frentes contra el EI en el norte del país.
El jefe del PYD, Saleh Muslim, acusó a Erdogan de querer "sembrar la confusión" con esos anuncios, según la agencia kurda Firatnews.
El comandante rebelde sirio y ex miembro de la dirección del ASL, el coronel Abdel Jabbar Al Okaidi, había confirmado el jueves que sus tropas "llegarían a Ain Al Arab (Kobane en árabe) en las próximas 36 horas".