MADRID.- Las autoridades españolas desarticularon dos "capítulos" de las bandas delictuales de origen latino Trinitarios y Dominican Don't Play (DDP), con un total de 35 detenidos en la región de Madrid, España.
Los Trinitarios estaban asentados en una localidad al norte de Madrid y los DDP en el distrito madrileño de Villaverde, en la capital.
La operación más reciente se llevo a cabo en Collado Villalba, donde se desarticuló el subgrupo o "capítulo" de Trinitarios asentado en esta localidad con la detención de veinticuatro jóvenes, dos de ellos menores de edad
Se les acusa de asociación ilícita, integración en grupo criminal, lesiones, un delito contra la salud pública y usurpación de bien inmueble porque ocupaban dos edificios.
Siete de los veinticuatro detenidos han ingresado a prisión.
Entre estos arrestados, que son de nacionalidad dominicana, ecuatoriana, colombiana y española, está el jefe o "suprema" del grupo, de veintiocho años y con varios antecedentes policiales.
El grupo había ocupado ilegalmente dos edificios, en los que algunos miembros vivían y en los que celebraban sus reuniones.
En una de las casas cultivaban marihuana que les servía para financiar sus actividades y también para captar a menores para el grupo.
La segunda operación sobre la que se informó hoy se llevó a cabo en octubre pasado y en ella fueron arrestadas once personas, cinco de ellas menores, del "capítulo" de los DDP del distrito madrileño de Villaverde.
A estos jóvenes, cuyo cabecilla también fue arrestado, se les imputan los delitos de tenencia ilícita de armas, amenazas, coacciones, lesiones y receptación, y se investiga si son autores de un homicidio en grado de tentativa por herir de gravedad a otro joven.
Cifuentes dijo que el pasado 19 de noviembre un menor de dieciséis años, de nacionalidad brasileña y perteneciente a los Trinitarios, fue tiroteado durante una reyerta entre ambas bandas.
Según una oficial de la policía, la mayoría de los integrantes de estas bandas son latinoamericanos, aunque también hay algún español.
Explicó que la mayoría de sus integrantes son menores, a los que se capta normalmente entre familias desestructuradas, jugando con el sentimiento de pertenencia a un grupo fuerte y también ofreciéndoles droga.
El Tribunal Supremo de España dictaminó el pasado 11 de febrero que los DDP es una asociación ilícita, por la cual se considera un delito el simple hecho de pertenecer a esta banda.