BEIJING- El gobierno municipal de Beijing aprobó una medida que prohibirá fumar en todos los espacios públicos cerrados (como centros de trabajo o medios de transporte) a partir del 1 de julio de 2015, una decisión sin precedentes en este país.
La decisión, votada hoy por el comité permanente de la Asamblea Popular Municipal de Beijing, incluye también la prohibición de fumar en las zonas al aire libre de guarderías, escuelas, museos, centros deportivos u hospitales.
La ley municipal prohíbe además la publicidad de productos de tabaco en las calles y en transportes públicos, así como en medios de comunicación de la capital china.
Las firmas tabaqueras tampoco podrán patrocinar eventos ni acontecimientos en la capital, según detalló la agencia oficial Xinhua.
Las escuelas deberán educar a sus estudiantes sobre los peligros del tabaco y tendrán que ayudar a los escolares que ya fumen a dejar el hábito.
La delegación en Beijing de la Organización Mundial de la Salud (OMS) se apresuró a felicitar a las autoridades de la capital por la decisión, que "abre la vía a una acción firme sobre el tabaco a nivel nacional", según indicó en un comunicado.
Para el representante de la OMS en China, Bernhard Schwartländer, la decisión constituye un "paso firme y decidido para mejorar la salud de los habitantes de Beijing".
"Beijing ha establecido el estándar para la adopción de un conjunto de medidas de control del tabaco a nivel nacional", añadió Schwartländer, para quien la decisión de hoy "salvará vidas".
Por otra parte, esta semana se informó de que el Gobierno chino estudia la posibilidad de prohibir la publicidad, promoción y patrocinio de productos de tabaco, de los que China es el mayor productor y consumidor mundial.
Según las cifras de la OMS, China tiene más de 300 millones de fumadores, lo que supone un 28,1 % de su población adulta y más de la mitad de los hombres adultos.
Más de un millón de personas mueren cada año en este país debido a enfermedades relacionadas con el consumo de tabaco, lo que supone unas 3.000 cada día.
Además, más de 700 millones de chinos son fumadores pasivos, de los que unos 100.000 mueren cada año por esta causa, añadió la Organización Mundial de la Salud.