NUEVA DELHI.- El Tribunal Internacional de Crímenes de Guerra de Bangladesh sentenció hoy a muerte a un líder islamista por crímenes contra la humanidad, en una nueva condena contra los acusados por el conflicto que independizó a este país de Pakistán en 1971.
Azharul Islam, de 61 años y vinculado a la Secretaría General del partido islamista Jamaat-e-Islami (JI), fue encontrado culpable de cinco de los seis cargos de los que era acusado y fue sentenciado a la pena capital por tres de ellos, según recoge el portal bangladesí Bdnews24.
En 1971 Islam era el jefe del Islami Chhatra Shangha -el brazo estudiantil del JI- en la ciudad de Rangpur, en el norte del país, y lideró durante el conflicto la milicia Al-Badr, que apoyaba al Ejército paquistaní.
El tribunal, que desde 2013 ha emitido, con esta, 16 sentencias contra acusados por crímenes contra la humanidad -la sexta desde octubre-, encontró culpable al líder islamista del asesinato de 1.414 personas, la mayoría de ellos hindúes.
Además Islam fue hallado culpable de participar en el secuestro y tortura de varios intelectuales y en la violación en masa de mujeres.
La última sentencia del tribunal especial se produjo hace una semana, cuando Slyed Muhamed Kaiser, exministro del partido Jatiya y antiguo líder de la Liga Musulmana, fue condenado a la horca por estar implicado en varias masacres, casos de violación y torturas.
Los juicios por crímenes de guerra son una promesa electoral de la primera ministra, Sheikh Hasina, de la Liga Awami, quien creó un tribunal en 2010 para juzgar a aquellos que colaboraron con Pakistán en el conflicto por la independencia.
En la guerra que independizó a Bangladesh de Pakistán murieron tres millones de personas y cientos de miles de mujeres fueron violadas, según datos no oficiales, puestos en duda por algunas investigaciones, que sitúan el número de fallecidos entre 300.000 y 500.000.
Los partidos islamistas y la oposición han denunciado que se trata de una estrategia política del Gobierno para eliminar a sus rivales.
El líder islamista Abdul Qader Molah fue ejecutado en diciembre en la primera de las aplicaciones de las penas de muerte.
Las condenas han desencadenado protestas islamistas que desde comienzos de 2013 han causado al menos 150 muertos a manos de las fuerzas de seguridad. EFE