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Santiago: Sábado 23 de noviembre del 2024 | Actualizado 02:07
BERLÍN.- La Canciller alemana, Angela Merkel, prometió hoy que protegerá a los musulmanes que residen en el país, garantizará su libertad de culto y perseguirá a quienes los ataquen, al tiempo que rechazó cualquier tipo de "exclusión o sospecha generalizada" sobre esa comunidad.
En una comparecencia extraordinaria ante el Bundestag (Cámara Baja) tras los atentados yihadistas de París, Merkel instó a la sociedad a "no dejarse dividir" y condenó los ataques tanto contra judíos, como contra musulmanes.
"La discriminación y la exclusión no deben tener cabida en nuestra sociedad", recalcó ante el pleno sin citar de forma expresa al movimiento Patriotas Europeos contra la Islamización de Occidente (Pegida), que cada lunes lidera grandes manifestaciones de tinte xenófobo en la ciudad de Dresde (este).
Tras subrayar la necesidad de que los musulmanes se desmarquen de aquellos que cometen actos terroristas en nombre del islam, dejó claro que la inmensa mayoría de los residente en Alemania son ciudadanos respetuosos con la ley, la Constitución y los valores europeos.
Merkel se defendió de las críticas que ha recibido, incluso en su propio partido, por decir el pasado lunes que "el islam forma parte de Alemania", una frase ya había pronunciado el presidente alemán en 2010 y a la que recurrió para condenar el terrorismo y la xenofobia en una rueda de prensa conjunta con el primer ministro turco.
La canciller recuperó sus palabras textuales del lunes y recordó que esa frase estaba precedida de la constatación de las raíces judeocristianas de Alemania.
En este contexto, recalcó que "el judaísmo es parte de la cultura y de la identidad" alemana y aseguró que luchar contra el antisemitismo es y será "un deber del Estado y de los ciudadanos".
