DRESDE/BERLÍN.- El fundador y líder del grupo islamófobo alemán Pegida, Lutz Bachmann, dimitió hoy tras la polémica que desató una foto suya caracterizado como Adolf Hitler y por declaraciones xenófobas que llevaron a la fiscalía de Dresde a abrir un sumario un su contra por incitación al odio o la xenofobia.
La portavoz de Pegida, Kathrin Oertel, informó a dpa de la decisión tomada por su líder. "Siento haber dañado los intereses de nuestro movimiento y asumo las consecuencias", explicó posteriormente Bachmann en un comunicado de disculpas emitido poco antes de la nueva marcha del grupo en Leipzig.
El fiscal Jan Hille explicó que Bachmann será investigado por un comentario en la red social Facebook al parecer redactado por él y que contiene expresiones que atentan contra la dignidad de extranjeros y solicitantes de asilo.
El análisis de la autenticidad del comentario, que comenzó a circular por las redes sociales el martes, forma parte de las investigaciones, añadió Hille. En el comentario se usan palabras como "animaluchos", "escoria" y "seres asquerosos" para referirse a los extranjeros.
"Nosotros como asociación rechazamos duramente el comentario de Facebook de Lutz Bachmann de septiembre que ha salido a la luz ahora", explicó la portavoz de Pegida.
En el comunicado, Bachmann se disculpa "sinceramente ante todos los ciudadanos que se han sentido atacados por mi comentario. Fueron comentarios irreflexivos, que hoy no volvería a hacer".
Bachmann fue además centro de una polémica hoy, después de que se conociera una foto suya en la que aparece disfrazado con el típico bigote y peinado del dictador nazi Adolf Hitler e imitando su expresión.
"De vez en cuando hay que tomarse en broma a uno mismo", dijo al diario "Bild" de hoy. Pegida explicó que la polémica foto fue "una broma".
Las explicaciones no impidieron que la impactante foto se difundiera rápidamente por las redes sociales desde la noche del martes acompañada por críticas y comentarios sobre "la verdadera cara" de Pegida.
La plana política en pleno se mostró indignada por los comentarios del alemán de 41 años y por la foto de Hitler. "El lobo ha enseñado su cola. Quien camine ahora al lado de Pegida ya no puede decir que no sabía que había un trasfondo racista en estas manifestaciones", explicó la política de materia interior del partido de La Izquierda Ulla Jelpke.
Mientras, el jefe del Partido Socialdemócrata (SPD) y vicecanciller alemán, Sigmar Gabriel, afirmó al diario "Bild" que "quien se caracteriza como Hitler en el mundo de la política es o un completo idiota o un nazi. Ahora cada uno debe reflexionar para ver si quiere caminar detrás de tipos así".
En tanto, el partido euroescéptico alemán Alternativa para Alemania (AfD), que la semana pasada buscó entrar en contacto con Pegida, aplaudió la dimisión de Bachmann y lamentó que "con estas tristes declaraciones e infames chistes haya avergonzado a las personas de Pegida que salen a las calles empujados por verdaderas preocupaciones", afirmó su portavoz, Christian Lth.
Pegida (siglas de "Europeos Patrióticos contra la Islamización de Occidente") viene organizando masivas marchas todos los lunes en Dresde en reclamo de políticas más duras de inmigración y asilo, a las que asisten tanto ciudadanos corrientes como neonazis y ultraderechistas.
Bachmann se encuentra actualmente bajo protección policial después de recibir amenazas de muerte. Las fuerzas de seguridad prohibieron además la marcha del lunes en Dresde por "amenazas concretas" de que se perpetrara un atentado islamista.
Tras la cancelación, Pegida convocó hoy una gran manifestación en la cercana Leipzig. La policía esperaba que hasta 100.000 personas participaran en la marcha islamófoba y en las contramanifestaciones a favor de una sociedad abierta y tolerante. Sin embargo, Pegida apenas consiguió reunir a unos 10.000, lejos de los 60.000 que había previsto.