SANTIAGO.- La defensa de Diego Lagomarsino, el hombre dueño del arma con la que murió el fiscal argentino Alberto Nisman, solicitará a la justicia de su país que la Presidenta Cristina Fernández declare como testigo.
"Voy a sugerir que Cristina Fernández y Aníbal Fernández, ya que tienen tanta información, se presenten como testigos", dijo Maximiliano Rusconi, abogado del técnico informático, en declaraciones a radio Mitre recogidas por La Nación.
Lagomarsino es actualmente el único imputado en la causa que investiga la muerte del persecutor, situación catalogada por Rusconi de "inaudita", insistiendo que "los aacercamientos al proceso penal fueron por voluntad de él (Lagomarsino)".
En este sentido, el abogado indicó que su defendido "se ha presentado, ha brindado información" y que su "comportamiento ha sido siempre el más transparente que uno pueda esperar".
"Es un testigo que ha demostrado una voluntad muy férrea de colaborar con la justicia (...) es un muchacho que no puede creer lo que le está pasando", señaló.
Diego Lagomarsino se encuentra actualmente con arraigo nacional y custodia asignada por la justicia, mientras que la fiscal que lleva el caso, Viviana Fein, busca las pruebas para ampliar las acusaciones en su contra.