SYDNEY.- Una de las víctimas que dejó la violenta toma de rehenes ocurrida en diciembre pasado en un café de Sydney falleció luego de ser impactada por fragmentos de una o más balas disparadas por los policías que efectuaron el asalto final contra el recinto.
La información fue conocida este jueves y surgió durante la investigación del incidente, en el que perdieron la vida Tori Johnson, de 34 años de edad y gerente del local, y Katrina Dawson, abogada de 38 años y madre de tres niños.
También murió el autor del secuestro, Man Haron Honis, de origen iraní.
Según el abogado Jeremy Gormly, abogado encargado de asistir al forense responsable de los peritajes, Dawson "fue alcanzada por seis fragmentos de una o varias balas que rebotaron en superficies sólidas".
"No detallaré los daños que sufrió la señora Dawson y solamente diré que un fragmento le afectó un vaso sanguíneo mayor. Inmediatamente perdió el conocimiento y murió poco después", añadió el profesional.
La revelación ocurre el día de la apertura de la investigación pública que busca determinar cómo ocurrieron los decesos de los rehenes e intenta establecer si pudieron haber sido evitados.
Ejecución de gerente
Johnson fue asesinado por el secuestrador, quien abrió fuego contra él con un fusil de caño recortado poco después de que varios rehenes lograron huir del establecimiento.
"Monis lo hizo arrodillarse en el suelo del café. Momentos después simplemente le disparó en la cabeza por detrás sin aviso ni advertencia", describió Gormly.
Los disparos hicieron que la policía apresurara la operació para ingresar al café, indica la investigación.
El atacante era un clérigo musulmán nacido en Irán que pidió asilo político en Australia a mediados de los '90 y luego se convirtió en ciudadano de ese país .