KIEV.- Por lo menos 18 civiles murieron víctimas del fuego de artillería durante enfrentamientos registrados en el este de Ucrania, horas antes del alto el fuego que entra en vigor esta medianoche.
Así lo denunciaron mandos militares ucranianos y dirigentes rebeldes en las últimas horas.
"El enemigo continúa bombardeando pueblos y ciudades sin miramientos", señaló un parte del cuartel general de las fuerzas ucranianas.
Desde el otro lado, el "número dos" de las milicias prorrusas de la autoproclamada "república popular de Donetsk", Eduard Basurin, denunció que en ese mismo período en ciudad de Donetsk murieron cuatro civiles por el fuego de la artillería ucraniana.
De acuerdo a reportes gubernamentales en Kiev, las fuerzas separatistas intentaron esta madrugada tomar por asalto posiciones de las tropas gubernamentales en las afueras de la ciudad Debáltsevo, estratégico nudo de comunicación situado a medio camino de Donetsk y Lugansk, ciudades controladas por los prorrusos.
La ciudad y sus alrededores son desde hace varias semanas escenario de encarnizados combates entre las tropas gubernamentales y las milicias.
Los prorrusos aseguran que en esa ciudad y sus afueras han conseguido cercar a más de 6.000 soldados. El mando ucraniano negó que sus fuerzas se encontraran aisladas.
En tanto, el Presidente ucraniano, Petró Poroshenko, acusó a los rebeldes de "atacar los acuerdos de Minsk" y reconoció que la posibilidad de paz "está en grave peligro".
Las conversaciones realizadas durante esta semana en esa ciudad, en las que participaron los gobernantes de Rusia, Ucrania, Alemania y Francia, consiguieron la suscripción de un hasta ahora precario acuerdo destinado a terminar con los sangrientos combates en el este de Ucrania.