TÚNEZ.- Cuatro gendarmes tunecinos murieron la noche del martes al miércoles en un "ataque terrorista" cerca de la frontera argelina, en una zona donde está activo un grupo yihadista, según el ministerio del Interior.
"El 18 de febrero, en un ataque terrorista en Bulaaba, gobernación de Kasserine, cuatro héroes de la Guardia Nacional cayeron como mártires", indicó el gabinete en un escueto comunicado.
Bulaaba está situada en la región de Monte Chaambi, macizo montañoso en la frontera con Argelia donde está activo el principal maquis yihadista tunecino.
Este grupo, ligado a Al Qaeda, es perseguido desde diciembre de 2012 por las fuerza tunecinas, que intentan neutralizar a estos combatientes, infructuosamente a pesar de varias campañas de bombardeos y operaciones terrestres.
Decenas de militares y policías murieron o resultaron heridos en emboscadas y en las explosiones de minas diseminadas en la zona de Chaambi y más al norte, a lo largo de la frontera.
El conglomerado, llamado Falange Okba Ibn Nafaa, realizó el ataque más sangriento de la historia del ejército tunecino (15 soldados muertos en Chaambi en julio). También reivindicó un asalto a finales de mayo contra el domicilio del ministro de Interior de la época.
Túnez conoce desde la revolución de enero de 2011 un auge del movimiento yihadista armado. El país fue profundamente desestabilizado en 2013 por los asesinatos de dos personalidades anti-islamistas.
En los últimos meses, según se acercaban las elecciones generales de finales de 2014, la policía tunecina dijo que multiplicó las detenciones y aseguró que neutralizó varios atentados.
Por otra parte, Túnez se ha convertido en una de las principales canteras para los grupos islamistas armados en Siria, Irak y Libia.
De 2.000 a 3.000 tunecinos combatirían en las filas yihadistas en el extranjero. Medio millar más han regresado al país, según la policía, y están considerados como una de las máximas amenazas para la seguridad de su territorio.