Kim Jong-un suele supervisar en persona las prácticas de sus Fuerzas Armadas.
AP (archivo)SEÚL.- En otra demostración de retórica belicista dirigida contra Estados Unidos y su vecino del Sur, el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, ordenó a sus soldados estar preparados para "aplastar" a las fuerzas de sus rivales.
En un discurso ante la Comisión Militar Central del Partido del Trabajo, calificado como "histórico" por sus seguidores, el dirigente pidió al Estado Mayor del Ejército Popular Coreano (APC) que "se prepare para reaccionar a cualquier forma de guerra declarada por el enemigo".
La reunión se efectuó después de un ejercicio militar supervisado por el propio Kim la semana pasada, que simulaba el ataque con artillería a una isla surcoreana en el mar Amarillo. Las prácticas se efectuaron en las islas de Mu y Jangjae, un importante "punto caliente" cerca de la frontera, hizo notar la agencia oficial Korean Central News Agency (KCNA).
Kim llamó al conjunto de las fuerzas armadas norcoreanas a intensificar sus entrenamientos para "llevar a su conclusión la confrontación antiestadounidense aplastando rápidamente al enemigo si atacara a Corea del Norte", según KCNA.
La misma unidad militar instalada en Mu bombardeó en 2010 la isla surcoreana de Yeonpyeong, en uno de los incidentes más graves desde el armisticio de 1953 entre ambos beligerantes.
Las afirmaciones de Kim preceden a las maniobras militares anuales conjuntas entre Estados Unidos y Corea del Sur, denominadas "Key Resolve" y "Foal Eagle", previstas para principios de marzo, en las que participan nutridos contingentes de las dos naciones.