Boris Nemtsov fue asesinado a balazos este viernes en Moscú.
EFE
MOSCÚ.- Tal vez fueron los extremistas islámicos quienes mataron a Boris Nemtsov. O alguien ofendido por su amor a la vida. O los agentes de una potencia occidental que no se detendrán ante nada para desacreditar la imagen del presidente Vladimir Putin y expulsarlo del poder.
Investigadores rusos, políticos y analistas de la televisión estatal cubrieron muchas teorías el sábado para encontrar la razón por la que Nemtsov fue asesinado a tiros en el corazón de Moscú, pero no mencionaron ninguna razón por la cual fue asesinado, solo se apunta a su incansable oposición a Putin.
Nemtsov, un ex viceprimer ministro de 55 años y principal figura política liberal de Rusia durante las últimas dos décadas, fue baleado a muerte poco después de la medianoche del viernes mientras caminaba por un puente cercano al Kremlin con una acompañante.
El asesinato sucedió apenas horas después de una entrevista en radio en la que había exhortado a los habitantes de Moscú a unirse a una marcha de oposición el domingo para protestar por la forma en que Putin enfrenta la crisis económica y su "enferma, agresiva y mortal política de guerra contra Ucrania".
Tras su muerte, los organizadores cancelaron la marcha y en lugar de eso pidieron una demostración de duelo en su honor el domingo en el centro de Moscú.
Las autoridades de la ciudad lo aprobaron de inmediato, en contraste con la lentitud con que otorgan permisos a regañadientes a las marchas de oposición.
La marcha de duelo podría servir para galvanizar a una agobiada y marginalizada oposición, o podría ser sólo una breve catarsis tras la cual las emociones se disipen.
El apoyo popular a Putin ha permanecido por encima del 80% en los últimos meses, pese a la severa recesión económica y la elevada inflación.
Los posibles motivos de su muerte
La principal agencia de investigación de Rusia informó que indagaba varios motivos posibles para el asesinato.
La primera posibilidad, de acuerdo al Comité Investigador, era que el homicidio tuviera la intención de desestabilizar la situación política del país y Nemtsov "fue una víctima de sacrificio por quienes no rehúyen a cualquier método para alcanzar sus metas políticas".
Tal sugerencia fue similar a las hechas por el vocero de Putin y otros políticos rusos que señalan que el ataque fue una "provocación" contra el Estado.
El término "víctima de sacrificio" fue el mismo que Putin utilizó hace tres años, cuando advirtió que sus adversarios políticos planeaban matar a uno de los suyos y culpar al gobierno.
Los investigadores señalaron que también consideraban que hubiera una "enemistad personal" en la vida privada de Nemtsov.
Una televisora controlada por el gobierno y con inclinaciones a favor del Kremlin, le prestó particular atención a la acompañante de Nemtsov, identificándola como una modelo ucraniana 30 años menor, mostrando fotografías de ella en poses sugerentes.
El Comité Investigador señaló que ambos iban rumbo al departamento de Nemtsov.
La agencia también mencionó la posibilidad de que el crimen haya sido llevado a cabo por extremistas islámicos molestos por la postura de Nemtsov a los ataques al semanario francés Charlie Hebdo, o que estaba conectado con el conflicto en Ucrania, donde los separatistas prorrusos han estado en combate con fuerzas ucranianas desde el pasado abril.