LISBOA.- El Primer Ministro portugués, Pedro Passos Coelho, se encuentra envuelto en una polémica luego de que reforzara a Hacienda como parte de una campaña contra el fraude y la evasión de impuestos, no obstante reconocer que no siempre cumplió con sis tributos.
En un comunicado publicado el viernes por el semanario Sol, el líder del gobierno de centroderecha dijo que algunos años presentó tarde sus declaraciones de impuestos "en ocasiones porque se me olvidó, en ocasiones porque no tenía dinero".
El primer ministro dijo que después había pagado las sumas pendientes y las sanciones. Las cantidades impagadas, según medios, ascendían a unos pocos miles de euros.
Los partidos de oposición afirmaron que en otros países, estos lapsus serían motivo de renuncia de un primer ministro, pero Passos Coelho dijo que no dimitiría.