FERGUSON.- Dos agentes de policía fueron baleados este jueves de madrugada durante una protesta en Ferguson, Missouri, indicó el jefe de policía del condado de Saint Louis, John Belmar.
Un agente de policía de 32 años nativo del suburbio de Webster Groves recibió un disparo en el rostro, mientras que otro de 41 años procedente del condado de Saint Louis resultó herido en el hombro, dijo Belmar. Ambos fueron trasladados a un hospital local, donde permanecían conscientes. El jefe de policía dijo no tener más información sobre su estado, pero describió sus heridas como "muy serias".
Belmar dijo desconocer quién había realizado los disparos.
El incidente se produjo ante la comisaría de Ferguson, donde se reunieron manifestantes tras la dimisión el día anterior del criticado jefe de policía, Thomas Jackson.
Jackson fue el sexto empleado de la ciudad en dimitir o ser despedido tras la publicación de un informe del Departamento de Justicia que absolvió al ex agente Darren Wilson de infringir los derechos civiles en el tiroteo del verano pasado que mató a Michael Brown, un joven negro de 18 años. Wilson dimitió después de su puesto.
Otro informe del Departamento describió un sistema judicial centrado en los beneficios y unos prejuicios raciales rampantes en el departamento de policía de Ferguson.
El alcalde de la ciudad, James Knowles III, anunció el miércoles que el ayuntamiento llegó a un acuerdo mutuo de separación con Jackson, según el cual se abonaría al jefe de policía un año de su salario anual de casi 96.000 dólares y cobertura médica. La renuncia de Jackson se hace efectiva el 19 de marzo, cuando Eickhoff se convertirá en jefe en funciones mientras la ciudad busca un sustituto.
Hasta ahora, Jackson se había resistido a las peticiones de los manifestantes y algunos cargos electos del estado de que dejara el cargo por su gestión del tiroteo de Brown y las semanas de protestas, en ocasiones violentas, que siguieron. Fue muy criticado desde el principio, tanto por la agresiva respuesta policial contra los manifestantes como una errática y poco frecuente publicación de información clave.
Jackson tardó casi una semana en identificar públicamente a Wilson como tirador y después avivó las tensiones en la comunidad desvelando el nombre de Wilson al mismo tiempo que un video de seguridad de una tienda que según la policía mostraba a Brown robando un paquete de cigarrillos y empujando a un tendero poco antes de su muerte.
En una rueda de prensa de 12 minutos, el alcalde de la ciudad, James Knowles III, dijo que Jackson había dimitido tras "mucha introspección" sobre cómo podría superar la comunidad las diferencias raciales derivadas del letal tiroteo del pasado verano.
"El jefe es la clase de persona honorable a la que no hay que acudir", dijo Knowles. "Él viene a uno cuando sabe que hay algo que debemos tratar con seriedad".
El responsable en funciones de la división de derechos civiles del Departamento de Justicia publicó un comunicado diciendo que el gobierno estadounidense sigue comprometido con alcanzar un "acuerdo vigente en un tribunal" para abordar las "prácticas inconstitucionales" de la ciudad, al margen de quién esté al cargo en la ciudad.